Diputado denuncia venta de gasolina a 50 bolivianos por 2 litros en Beni
Tres provincias llevan más de 20 días sin combustible. El legislador Genghis Justiniano responsabiliza al Gobierno y al conflicto interno del MAS. La escasez paraliza el transporte y obliga a colas de hasta una semana.
«ANH y YPFB mienten sobre el abastecimiento»
El diputado por Beni acusó a las estatales de ocultar la crisis real: «En Iténez, Mamoré y Yacuma no hay ni una gota de gasolina o diésel». Los surtidores están inoperativos y la población migra a Trinidad, donde solo se distribuye la mitad del combustible necesario.
Impacto en la vida diaria
El 80% de las mototaxis y 60% del transporte interprovincial están paralizados. Familias esperan entre cinco y siete días en filas para comprar carburante, mientras el precio en el mercado negro alcanza los 15 bolivianos por litro.
Un conflicto político que se paga en la bomba
Justiniano vinculó la crisis con la pugna entre el presidente Luis Arce, Evo Morales y Andrónico Rodríguez. «La subvención es un discurso vacío», afirmó, al denunciar que la falta de coordinación gubernamental afecta a los departamentos más vulnerables.
Beni, el espejo de una crisis nacional
Bolivia arrastra desabastecimiento de combustibles desde 2024, con protestas en múltiples regiones. El MAS prometió garantizar el suministro, pero la distribución irregular persiste, especialmente en zonas alejadas de los centros urbanos.
La ciudadanía sigue esperando soluciones
La denuncia del diputado refleja el malestar creciente por la escasez. Sin medidas concretas, el mercado negro y las colas interminables dominan el panorama, mientras las autoridades no ofrecen plazos para normalizar el abastecimiento.