Israel advierte a Jamenei con «destino similar al de Sadam Husein»
El ministro de Defensa israelí vincula al líder iraní con crímenes de guerra. Las declaraciones se producen tras cuatro días de bombardeos mutuos que han dejado 248 muertos. Katz alaba los «logros» militares israelíes, incluida la muerte del jefe del Estado Mayor iraní.
«Golpeando a Irán en todos los frentes»
Israel Katz, ministro de Defensa de Israel, amenazó directamente al ayatolá Alí Jamenei este martes: «Debe recordar lo que pasó al dictador del país vecino de Irán», en clara referencia a la ejecución de Sadam Husein. La advertencia llega tras los ataques israelíes iniciados el 13 de junio contra instalaciones nucleares y áreas civiles en Teherán.
Balance de una escalada
Según el comunicado de Katz, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han obtenido «maravillosos logros», entre ellos la eliminación de Ali Shadmani, nuevo jefe del Estado Mayor iraní. Israel también bombardeó la sede de la televisión pública IRIB, causando al menos tres muertos. Irán reporta 224 fallecidos y miles de heridos, mientras Israel contabiliza 24 víctimas mortales por represalias.
Instrucciones para civiles
Katz instó a los residentes de Teherán a «evacuar lugares estratégicos» siguiendo las indicaciones del Ejército israelí: «No sean rehenes del dictador». Advirtió que el «largo brazo de Israel» seguirá actuando contra blancos enemigos.
Negociaciones nucleares suspendidas
Los bombardeos interrumpieron las conversaciones entre EE.UU. e Irán sobre el programa nuclear previstas para el 16 de junio en Omán. Teherán canceló la cita tras los ataques, profundizando la crisis diplomática.
Una advertencia con precedentes históricos
La comparación con Sadam Husein evoca la invasión estadounidense de Irak en 2003 y su posterior ejecución. Katz utiliza este paralelismo para presionar a Jamenei, en un conflicto que ya ha superado el ámbito militar, afectando a infraestructuras civiles y comunicaciones.
Una escalada sin freno inmediato
Las declaraciones de Katz confirman que Israel mantendrá su ofensiva, mientras Irán responde con ataques limitados. La cancelación de las negociaciones nucleares sugiere que la confrontación seguirá definiendo las relaciones bilaterales, con consecuencias humanitarias crecientes.