Gobernadores y primeros ministros canadienses analizan impacto de aranceles de Trump
Reunión bilateral en Boston busca mitigar daños económicos. Líderes de EE.UU. y Canadá evalúan pérdidas turísticas y comerciales tras medidas proteccionistas. El encuentro ocurrió el 16 de junio de 2025 con presencia de cinco gobernadores demócratas y cinco representantes provinciales canadienses.
«Una discusión sobria sobre consecuencias tangibles»
La gobernadora de Massachusetts, Maura Healey, reveló que el turismo en estados del noreste ha caído entre 20% y 60% debido al «boicot de facto» de visitantes canadienses. «Nuestra economía estacional depende de junio a septiembre», subrayó. Los participantes coincidieron en que los aranceles son «un impuesto a los estadounidenses», según Doug Ford de Ontario.
Reacciones desde el norte
Susan Holt, primera ministra de New Brunswick, admitió que recomienda a sus ciudadanos «evitar viajar a EE.UU.» temporalmente. «Necesitamos que cierto personaje entienda que esto destruye empleos», declaró, refiriéndose a Trump. Tim Houston de Nueva Escocia criticó las tensiones: «Cuando hablan de convertirnos en el estado 51, nos enoja».
Antecedentes: Una relación fracturada por tuits
El conflicto surge tras la imposición de aranceles unilaterales por parte de Trump, exacerbando tensiones comerciales entre socios históricos. Canadá y EE.UU. comparten una interdependencia económica en energía (hidroeléctrica y gas natural) y turismo, ahora amenazada por decisiones federales.
Mirando al futuro con pragmatismo
Los líderes exploran acuerdos regionales al margen de Washington y Ottawa. Kathy Hochul (Nueva York) propuso «relaciones individuales entre estados y provincias» para garantizar seguridad energética. Healey advirtió que China «es la gran ganadora» de esta disputa, mientras Canadá atrae talento y turismo que antes elegía EE.UU.