ONU vigilará a Bolivia por riesgo de hambruna en 2025
La organización alerta de que el 19% de la población sufre inseguridad alimentaria aguda. La crisis económica, con inflación histórica y falta de dólares, amenaza con agravarse entre junio y octubre. El Gobierno de Arce rechaza cambios estructurales en su modelo.
«Una tormenta perfecta: inflación, escasez y parálisis política»
La ONU incluyó a Bolivia entre los países sudamericanos con mayor riesgo de hambruna, junto a Colombia. La FAO y el PMA prevén un deterioro acelerado por la «alta inflación persistente y la disminución de reservas extranjeras». La moneda nacional se deprecia y hay dificultades para importar productos básicos.
El círculo vicioso de la producción
La escasez de combustible, derivada de la falta de reservas, afectará a las actividades agrícolas, especialmente a la producción de maíz. Esto agravaría la ya crítica situación: en octubre de 2024, 2,2 millones de bolivianos (19% de la población) sufrían inseguridad alimentaria aguda.
Veinte años de crisis acumulada
El texto atribuye la situación actual a la «mala administración» durante los casi 20 años de gobierno del MAS. Desde febrero de 2023, la crisis se intensificó, pero el Ejecutivo de Luis Arce se resiste a aplicar medidas estructurales, defendiendo su modelo económico.
Un horizonte sombrío hasta octubre
Los organismos internacionales anticipan que el peor escenario se desarrollará en los próximos cinco meses. Sin cambios en la política económica, la combinación de inflación, depreciación monetaria y problemas agrícolas podría dejar a más bolivianos sin acceso a alimentos básicos.