Bolivia denuncia a Evo Morales ante cortes internacionales por terrorismo
El Gobierno acusa a grupos afines a Morales de asesinar a 4 policías y un civil. Los hechos ocurrieron en Llallagua (Potosí) durante bloqueos con francotiradores y paramilitares. Se presentaron denuncias ante la Corte-IDH, la ONU y otros organismos.
«Asesinatos planificados con extrema violencia»
El vicecanciller Elmer Catarina detalló que los ataques en Llallagua fueron «un atentado contra la democracia». Los policías murieron torturados, con explosivos o disparos. El presidente Luis Arce alertó que estos actos «ponen en riesgo las elecciones».
Los crímenes
Entre las víctimas figuran cuatro policías, incluido el subteniente Christian Calle Alcón, cuyo cuerpo fue hallado con «el vientre destrozado por una dinamita». También murió un civil en Cochabamba. Las autoridades identificaron a francotiradores y campesinos del ayllu Chullpa, zona vinculada al narcotráfico.
La respuesta internacional
Bolivia llevó el caso a la Corte-IDH, la ONU y el Consejo de Derechos Humanos. El abogado Jorge Santistevan afirmó que «existen grupos subversivos entrenados en tácticas militares» bajo el mando de Morales.
Llallagua: tres días de terror
Los pobladores recibieron con «pañuelos blancos» a militares que desbloquearon rutas. La zona sufrió saqueos y escasez de alimentos. El ministro de Justicia, César Siles, señaló que los ataques fueron «actos terroristas» con paramilitares.
Un escenario de narcotráfico y tensión política
Las autoridades vincularon los hechos con «México Chico», una zona de cultivos ilegales. Santistevan acusó a Morales de liderar una «organización criminal» para derrocar al Gobierno. Se descartó un estado de sitio para no suspender las elecciones.
La democracia bajo fuego cruzado
El caso expone la escalada de violencia en Bolivia, con denuncias internacionales y un clima político polarizado. La eficacia de las acciones judiciales dependerá de las pruebas presentadas ante los organismos globales.