Herramientas de IA amenazan empleos junior por su bajo costo
Los agentes de IA cuestan hasta 500 veces menos que un salario humano. Expertos advierten que la asequibilidad de estas herramientas podría eliminar puestos de entrada, afectando la formación de futuros profesionales. La preocupación surge mientras empresas como OpenAI comparan sus sistemas con «trabajadores experimentados».
«El precio de la IA no refleja su impacto laboral»
Luke Arrigoni, CEO de Loti AI, señala que herramientas de codificación avanzada hoy cuestan $120 anuales frente a los $63.000 que ganaba un junior en 2007. «Si la IA fuera más cara, habría incentivos para contratar humanos», afirma. OpenAI, cuyos agentes ya realizan tareas como ventas o desarrollo de software, no ha planteado subir precios para frenar este fenómeno.
La carrera hacia la adopción masiva
Empresas como Decagon ofrecen chatbots de servicio al cliente por $1 por conversación, la mitad del costo humano. Su CEO, Jesse Zhang, admite que «el punto de la tecnología es ser más barata que el trabajo humano». Startups priorizan crecimiento sobre rentabilidad, respaldadas por inversionistas como Andreessen Horowitz.
Un mercado que distorsiona valores
Erica Brescia, de Redpoint Ventures, critica que planes como Google AI Ultra ($250 mensuales) sean «desproporcionadamente baratos para el valor que generan». GitHub, pionero en IA para desarrolladores, mantiene su herramienta Copilot en $21 mensuales pese a reconocer que podría valer 100 veces más. Nathan Sobo, CEO de Zed, defiende precios accesibles pero advierte: «Los modelos actuales no son sostenibles».
Cuando la IA era un sueño lejano
En 2022, ChatGPT inició la explosión de IA gratuita o de bajo costo. Desde entonces, la competencia ha mantenido precios artificialmente bajos. Aunque algunas funciones premium han subido, ninguna alcanza para cubrir costos operativos o disuadir la sustitución laboral.
¿Quién formará a los arquitectos del futuro?
Si los roles junior desaparecen, faltarán profesionales capacitados para supervisar sistemas de IA. Simon Johnson, del MIT, propone reducir impuestos para contratar novatos. Mientras, Arrigoni rechaza usar estas herramientas en su empresa: «No quiero ser culpable del apocalipsis laboral».