Bolivia denuncia a Evo Morales ante organismos internacionales por violencia
El Gobierno acusa a Morales de instigar crímenes durante bloqueos que dejaron cinco muertos. La denuncia se presentará ante la CIDH, la ONU y el Consejo de Derechos Humanos. El vicecanciller Edgar Catarina calificó los hechos como «asesinatos planificados».
«Denuncia diplomática para proteger la democracia»
Bolivia inició un despliegue diplomático «de alto nivel» para documentar los hechos violentos en Llallagua y Cochabamba. Cinco personas murieron, incluidos cuatro policías, durante protestas afines a Morales. Catarina aseguró que la reelección indefinida «no es un derecho humano», respaldado por fallos de la Corte Interamericana y el Tribunal Constitucional boliviano.
Acciones internacionales y observación electoral
El Gobierno invitó a misiones de la OEA, la UE y otras entidades para supervisar las elecciones del 17 de agosto. «Más de 200 invitados ya confirmaron su presencia», adelantó Catarina. Paralelamente, se entregó un informe detallado a embajadores sobre los incidentes y el cronograma electoral.
Posible intervención militar
El Ejecutivo evalúa acciones constitucionales para garantizar seguridad, aunque la decisión final sobre despliegue militar la tomará el presidente Luis Arce tras una cumbre multipartidaria en Santa Cruz. Catarina subrayó: «La violencia no puede ser el camino en una democracia».
Antecedentes: Un conflicto que escala
Los bloqueos y enfrentamientos surgieron tras la insistencia de Morales en candidatearse, pese a que tribunales nacionales e internacionales rechazaron su postulación. Los incidentes incluyeron el uso de dinamita contra efectivos policiales, según el Gobierno.
El camino hacia las elecciones
La denuncia internacional busca presionar para que los comicios se desarrollen sin violencia. El éxito de la estrategia dependerá de la respuesta de los organismos y de la contención de nuevos episodios de conflicto.