Trump celebra acuerdo con China pese a avances limitados en comercio
El presidente estadounidense anuncia marcos generales con Reino Unido y China, pero sin acuerdos concretos. Critican su estrategia por generar incertidumbre empresarial. El plazo autoimpuesto para negociaciones vence el 8 de julio.
«90 acuerdos en 90 días»: promesa incumplida
Trump prometió rápidos pactos comerciales, pero solo ha logrado «marcos generales» con China y Reino Unido. «Lo presentarán como progreso significativo, pero son avances limitados», critica Marc Short, excolaborador de Trump. La Casa Blanca defiende que el acuerdo con China demuestra su firmeza frente a su mayor adversario económico.
Reacciones y plazos extendidos
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, admitió que es «altamente probable» prorrogar el plazo del 8 de julio para 18 socios comerciales. Trump insiste en que no será necesario, pero las negociaciones con Japón, Corea del Sur y la UE avanzan lentamente.
Cumbre del G7: próxima oportunidad
Líderes mundiales esperan avances en la reunión de Canadá. Un funcionario canadiense anónimo advierte: «Depende de la capacidad de EE.UU. para manejar múltiples negociaciones». México podría cerrar un acuerdo estrecho sobre aranceles al acero, según fuentes cercanas a la Casa Blanca.
Frustración empresarial y aliados divididos
Algunos aliados de Trump critican la falta de claridad en su estrategia: «No tengo idea de qué pretenden», dijo uno. Otros, como el senador Bernie Moreno, culpan a los socios comerciales: «Es vergonzoso para la UE o Japón que China firme primero».
Antecedentes: aranceles y tensiones globales
Trump reactivó en primavera los aranceles masivos del «Día de la Liberación», presionando a socios comerciales. La UE criticó subidas repentinas, como las del acero, mientras China mantiene tarifas promedio del 55%. El USMCA, pacto norteamericano de su primer mandato, contrasta con la lentitud actual.
¿Acuerdos a la vista o más incertidumbre?
El gobierno insiste en que los pactos están «cerca», pero empresarios y socios comerciales siguen a la espera. Mientras, los aranceles del 10% global y hasta el 55% con China ya han reconfigurado el panorama económico. La eficacia de la estrategia se medirá tras el 8 de julio.