Sherrill y Ciattarelli competirán por la gobernación de Nueva Jersey en noviembre
La elección será una prueba del atractivo de Trump en un estado tradicionalmente demócrata. Las primarias fueron las más caras de la historia del estado, con más de 120 millones de dólares gastados, y las primeras en 44 años sin un diseño de papeleta que favoreciera a los líderes partidistas.
Una batalla marcada por Trump
La demócrata Mikie Sherrill, congresista desde 2018, y el republicano Jack Ciattarelli, candidato en 2021, se enfrentarán en las elecciones generales del 4 de noviembre. Sherrill venció a cinco rivales, mientras que Ciattarelli superó a cuatro, incluido el exlocutor Bill Spadea, tras obtener el respaldo de Trump.
El peso de las máquinas políticas
A pesar de la eliminación del «county line» —un sistema que beneficiaba a candidatos respaldados por líderes partidistas—, los establecimientos demócrata y republicano impusieron a sus favoritos. Sherrill contó con el apoyo de varios condados clave, mientras que Ciattarelli consolidó su ventaja tras alinearse abiertamente con Trump.
Campañas agresivas y polarizantes
Sherrill tachó a Ciattarelli de «lacayo de Trump» y lo vinculó al movimiento MAGA en sus anuncios. Por su parte, Ciattarelli acusó a Sherrill de obsesionarse con Trump y la criticó por evitar «posiciones arriesgadas». El resultado en noviembre podría anticipar tendencias para las elecciones de medio término de 2026.
Un terreno en disputa
Aunque los demócratas superan en 800.000 votantes registrados a los republicanos, Nueva Jersey ha elegido gobernadores republicanos antes. El GOP ganó más de 100.000 votantes en años recientes, y la ajustada derrota de Trump en 2024 alimenta sus esperanzas.
El veredicto llegará en noviembre
La elección, junto con la de Virginia, será clave para medir el clima político nacional. Sherrill apela a frenar el avance de MAGA, mientras Ciattarelli busca capitalizar el descontento con el status quo. El gasto récord y la polarización marcan una contienda decisiva.
