Kweisi Mfume compite por liderar el Comité de Supervisión de los demócratas
El veterano congresista de 76 años apuesta por su experiencia frente a rivales más jóvenes. La elección refleja el debate interno del partido sobre seniority vs. agresividad contra Trump. El resultado se decidirá el 24 de junio.
«Dinosaurs vs. nueva guardia»: la batalla por el Oversight
Kweisi Mfume (Maryland), exlíder del Caucus Negro Congresional y de la NAACP en los 90, busca el puesto vacante tras la muerte de Gerry Connolly. «Empecé cuando los dinosaurios poblaban la tierra», bromeó sobre su estilo conciliador. Frente a él, tres rivales: Jasmine Crockett (Texas), Robert Garcia (California) y Stephen Lynch (Massachusetts), estos dos últimos con enfoques más combativos contra Trump.
Un comité en primera línea
El ganador dirigirá las investigaciones contra el gobierno de Trump si los demócratas recuperan la Cámara en 2026. «Es una pelea callejera diaria», admitió la congresista Lateefah Simon. Mfume promete priorizar consensos, mientras Crockett plantea un impeachment y Lynch intentó citar a Elon Musk.
De Baltimore al Capitolio: 45 años en la arena pública
Mfume saltó a la fama en los 90 como negociador clave con Clinton, pero abandonó el Congreso en 1996 frustrado por el sistema de antigüedad. Ahora, reivindica el legado de Elijah Cummings, su sucesor en el distrito y exjefe del Oversight, aunque sin contar con el respaldo oficial del Caucus Negro.
Sombra de controversias
Su salida de la NAACP en 2004 estuvo marcada por un acuerdo económico por acoso sexual que él niega. «Nadie corroboró esa acusación», insistió. Algunos demócratas temen que este historial reste credibilidad para investigar a Trump.
El peso de los años vs. la urgencia de la base
La votación del 24 de junio será un termómetro del partido: seniority (Lynch tiene más antigüedad en el comité) vs. renovación. Ro Khanna (California), de 48 años, respalda a Mfume: «No voy a competir contra el mejor amigo de Nelson Mandela».
Cierre: Más que un nombre, un estilo
Mfume encarna un modelo de política menos confrontativo, en contraste con la base demócrata que exige firmeza ante Trump. Su destino mostrará qué valora más la bancada: experiencia o combate.