Defensoría del Pueblo urge diálogo tras muerte de dos policías en Llallagua
Bloqueadores evistas atacaron una caravana policial con armas y dinamita. La Defensoría advierte que la violencia «ha cruzado una línea peligrosa» y exige un cuarto intermedio. Los incidentes incluyeron saqueos y destrucción de oficinas públicas en la población minera.
«La intransigencia provoca violencia y luto en Bolivia»
La Defensoría del Pueblo, liderada por Pedro Callisaya, emitió un comunicado este miércoles tras los ataques en Llallagua, donde dos policías fallecieron y un tercero quedó grave. Los movilizados también atacaron comercios y dependencias de la FELCC y FELCV. «Aún estamos a tiempo de reconducir esta situación», señaló la institución.
Requisitos para la paz
La Defensoría pidió acuerdos concretos: garantizar las elecciones del 17 de agosto, responder a la crisis económica y respetar los derechos humanos. «Las bolivianas y bolivianos queremos seguridad y convivencia pacífica», destacó el texto. La Fiscalía ya investiga los hechos.
Un contexto de tensión creciente
Los bloqueos y enfrentamientos se intensificaron en semanas recientes, con protestas que afectan el suministro de alimentos y la seguridad ciudadana. Llallagua, zona minera históricamente conflictiva, ha sido escenario clave de esta escalada.
La ventana para evitar más tragedias
El llamado de la Defensoría busca frenar la violencia mientras se negocian soluciones. La presión aumenta sobre el Gobierno y los manifestantes para retomar el diálogo, en un escenario marcado por muertes y daños materiales.