Gobierno boliviano mantiene cerrada la APDHB desde toma violenta en 2022
La sede de la APDHB permanece clausurada bajo custodia policial desde hace tres años. La institución denuncia que el Ejecutivo respalda a grupos afines al MAS que ocuparon sus instalaciones. Mientras preparan un congreso para recuperar el local, atienden en espacios improvisados.
«Indignación por la custodia policial permanente»
Yolanda Herrera, vicepresidenta de la APDHB, denunció que el Ministerio de Gobierno ordenó la vigilancia policial 24/7 en su sede. «Quienes tomaron la casa eran funcionales al partido de gobierno», afirmó. La atención a víctimas se realiza en la calle o locales cedidos, como hace su presidenta, Amparo Carvajal.
La toma y la división interna
El 2 de junio de 2022, un grupo liderado por Édgar Salazar (MAS) ingresó violentamente a la sede en la avenida 6 de Agosto (La Paz). Hoy, la dirigencia paralela está fracturada y encabezada por Remberto Cruz. Herrera exigió diálogo para recuperar el local, pero rechazan negociar «con sus verdugos».
Un conflicto que se arrastra
La APDHB, histórica defensora de DDHH en Bolivia, enfrenta tensiones con el Gobierno desde 2020. La actual administración acusa a la institución de parcialidad, mientras esta critica «persistencia de violaciones a derechos fundamentales». La toma de 2022 profundizó la polarización.
El congreso como última esperanza
La APDHB apuesta a un congreso nacional para reunificar a sus miembros y recuperar su sede. Sin embargo, la negativa a dialogar con la dirigencia paralela y el respaldo estatal a la custodia policial complican el proceso. La solución dependerá de voluntades políticas y presión social.