Arce vincula muertes de 2019 al «capricho» de reelección de Morales
El presidente boliviano responsabiliza por primera vez a Evo Morales de las víctimas de Sacaba y Senkata. Lo declaró durante su visita a heridos por los bloqueos actuales, que calificó de «teatro político» para forzar una candidatura inviable.
«Un golpe por capricho reeleccionista»
Luis Arce afirmó que las muertes de 2019 fueron «producto del capricho» de Morales por perpetuarse en el poder. «No repetiremos errores que llevan al luto», dijo el domingo en Cochabamba, rompiendo su narrativa previa que culpaba a Jeanine Áñez. Acusó a su exlíder de usar bloqueos actuales para «riesgo de vidas» y fines inconstitucionales.
Bloqueos con trasfondo político
El mandatario desmintió que las protestas evistas respondan a crisis económica: «Es teatro. Solo buscan habilitar una candidatura imposible». Criticó que Morales actúe «desde el trópico» sin considerar el daño a la población, y lo acusó de estrangular la economía desde la Asamblea en 2021 al bloquear créditos internacionales.
Ecos de una crisis no resuelta
Los eventos de 2019, con masacres en Sacaba y Senkata durante la crisis postelectoral, dividieron al país. Áñez enfrenta procesos judiciales por esas muertes, mientras el MAS mantenía hasta ahora que fueron consecuencia del «golpe» contra Morales. Arce redefine ahora el relato oficial, aunque evitó mencionar a la expresidenta.
Un mensaje sin ambigüedades
El discurso marca un punto de no retorno en la fractura entre Arce y Morales. El presidente advirtió que no tolerará «mentiras» que pongan en peligro vidas, evocando explícitamente el trauma de 2019. La crisis actual, con siete días de bloqueos y violencia creciente, tensiona al gobierno ante un escenario de polarización renovada.