Reseña destaca ‘Manqapacha Delight’ como novela distópica boliviana
Camila Urioste mezcla rebelión política y tradición textil en su obra futurista. La novela, publicada por Editorial 3600 en 2024, critica regímenes autoritarios mediante una trama que une ciencia ficción y mitología andina. Santiago Espinoza analiza el libro en la iniciativa ‘Autores leyendo autores’.
«Tejer la resistencia en una Bolivia del 2030»
La novela ambienta en un futuro distópico donde Bolivia es gobernada por el «Emperador», figura que evoca a Evo Morales. «El régimen controla a la población con tecnología y elecciones amañadas», describe Espinoza. La trama sigue a cuatro personajes: una tejedora indígena, una rebelde venezolana, una funcionaria corruptible y el tirano obsesionado con el poder.
Hilos narrativos que convergen
La estructura imita un tejido con tres «manuales» que representan mundos andinos: buenos modales (Hanan Pacha), resistencia (Kay Pacha) y tejido (Manqapacha). «Cada capítulo es un punto de vista que se entrelaza», explica el reseñista. El quipu sin nudos de una momia andina permite a la protagonista Elo comunicarse con ancestros y aprender a tejer.
Raíces en la literatura boliviana
Espinoza vincula la obra con títulos como ‘De cuando en cuando Saturnina’ de Alison Spedding por su distopía andina, y con relatos de Giovanna Rivero por su fantasía oscura. «Urioste destaca por su tono aventurero y humor punk», resalta, ejemplificado en Alicia, la migrante venezolana que lidera la rebelión.
Cuando la ficción teje memoria
La novela recupera la tradición textil Jalq’a como metáfora de resistencia. Según el análisis, «la insurrección solo es posible al unir voluntades individuales, como hilos en un tejido». Urioste plantea volver al pasado (tejer) para construir futuro, resonando con filosofías andinas de memoria larga.
Un libro que deja puntadas abiertas
La reseña subraya cómo la obra combina entretenimiento y crítica social sin solemnidad. Más allá de su trama cyberpunk, propone releer saberes ancestrales para enfrentar sistemas opresivos actuales. Su estructura textil/textual refleja su mensaje central: la unidad como acto político creativo.