EEUU devuelve a guatemalteco deportado ilegalmente a México
Un juez federal ordenó su regreso para garantizar su derecho a asilo. El hombre, identificado como O.C.G., fue enviado inicialmente a Guatemala pese a temor fundado de persecución. Ahora permanecerá en un centro de detención en Arizona.
«Un error con consecuencias»
La administración Trump deportó a O.C.G. a México en febrero, sin evaluar su miedo a persecución por ser gay, según la demanda presentada. El juez Brian Murphy determinó que el procedimiento violó sus derechos y ordenó su repatriación a EEUU. «El sistema de asilo no es un pase libre», criticó el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
El largo camino de O.C.G.
El guatemalteco había sido violado y amenazado en México, país al que aceptó ser deportado por falta de opciones. Un juez de inmigración ya había bloqueado su expulsión a Guatemala por riesgo de persecución. El DHS rectificó su versión inicial tras admitir un «error en sus registros».
Batalla legal con trasfondo político
El caso reaviva el debate sobre las deportaciones a «terceros países seguros», política impulsada por Trump. El DHS calificó la orden judicial de «activismo», mientras defensores de migrantes celebran el fallo como un precedente para proteger derechos procesales.
Asilo en el punto de mira
El gobierno estadounidense argumenta que el sistema de asilo se usa como «amnistía encubierta», especialmente bajo políticas de Biden. O.C.G. deberá ahora demostrar ante un tribunal su elegibilidad para permanecer en EEUU, un proceso que podría prolongarse meses.
Un caso que marca tendencia
Su retorno, menos complejo que otros similares al no estar encarcelado, sienta un precedente para futuras deportaciones irregulares. El DHS mantiene su postura de priorizar expulsiones rápidas, pese a las críticas judiciales.