Opositores denuncian que bloqueos del MAS agravan crisis en Bolivia

Manfred Reyes Villa y Luis Fernando Camacho acusan al MAS de agravar la crisis económica con bloqueos en carreteras, mientras el Gobierno responsabiliza a Evo Morales.
El Deber

Opositores denuncian que bloqueos del MAS agravan crisis económica en Bolivia

Manfred Reyes Villa y Luis Fernando Camacho acusan a Evo Morales de promover violencia y desabastecimiento. Los bloqueos en carreteras cumplen tres días, con Cochabamba como epicentro. El Gobierno responsabiliza al expresidente de buscar su renuncia para habilitar su candidatura.

«El MAS está acabando con Bolivia», la acusación de los opositores

Manfred Reyes Villa, candidato presidencial y alcalde de Cochabamba, afirmó que las protestas «generan violencia, afectan la economía y debilitan la institucionalidad». Por su parte, el gobernador electo de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, sostuvo que «el MAS se ha vuelto el principal problema de la economía», vinculando los bloqueos al alza de precios.

Cochabamba, el departamento más afectado

Según el ministro Roberto Ríos, existen al menos 20 puntos de conflicto, concentrados en esta región. El presidente Luis Arce insistió en que Morales «miente sobre los motivos económicos» de las protestas y busca forzar su candidatura pese a impedimentos constitucionales.

Un país en «fuego cruzado»

Camacho y Reyes Villa coincidieron en que el partido oficialista «incendia el país para no perder poder». Otros candidatos, como Samuel Doria Medina y Eva Copa, respaldaron esta postura, señalando que Morales pretende «convulsionar Bolivia para su beneficio político».

Dos décadas de dominio masista

El MAS gobierna Bolivia desde 2006. Las protestas actuales replican el patrón de bloqueos de 2024, en un contexto de crisis económica con inflación y desabastecimiento. El Ejecutivo asegura que Policía y FFAA coordinan acciones para restablecer el orden.

La sombra de la inestabilidad se alarga

El conflicto evidencia la polarización política en vísperas electorales. Mientras el oficialismo atribuye la crisis a «grupos violentos», la oposición exige el fin de lo que califican como «tácticas desestabilizadoras del MAS». La resolución dependerá de la capacidad institucional para garantizar el libre tránsito y el diálogo.