Evo Morales tilda de «hipocresía» denuncia de Cancillería boliviana
El expresidente rechaza acusaciones de desestabilización al Gobierno de Arce. La Cancillería alertó a la comunidad internacional sobre presuntas acciones para vulnerar el mandato constitucional. El conflicto escaló durante un acto en Villa Tunari este miércoles.
«No van a confundir al mundo con mentiras»
Evo Morales calificó como «hipocresía» el comunicado de la Cancillería, que lo acusa de impulsar movilizaciones para «acortar el mandato de Luis Arce». «Pobre Cancillería, cómo quedará», declaró durante un acto público, negando su inhabilitación constitucional.
Respaldos internacionales y réplica oficial
Morales mencionó el apoyo de tres expresidentes sudamericanos: Rafael Correa (Ecuador), Ernesto Samper (Colombia) y Cristina Fernández (Argentina). La Cancillería insistió en que «ningún actor político puede situarse por encima de la ley» y pidió vigilancia internacional.
Antecedentes: Una pugna con raíces constitucionales
El conflicto surge tras la inhabilitación legal de Morales para postularse nuevamente a la presidencia, declarada por órganos electorales bolivianos. La Cancillería reiteró que sus acciones buscan «resguardar la democracia», mientras Morales las atribuye a una campaña de desprestigio.
El pulso sigue en la arena internacional
La disputa trasciende lo nacional: Bolivia solicita respaldo externo ante supuestas amenazas a la estabilidad, mientras Morales busca legitimidad con apoyos regionales. El diálogo parece lejano, con posturas irreconciliables sobre la interpretación constitucional.