Cuatro sectores protestan en Bolivia por escasez de combustible y alza de precios
Transportistas, comerciantes, mypes y vecinos exigen soluciones urgentes. Las movilizaciones comenzaron el lunes en Cochabamba y se extendieron a otras regiones. El Gobierno mantiene controles de precios mientras YPFB asegura maximizar la entrega de combustibles, pese a los bloqueos.
«Hacer empresa es prácticamente imposible»
La Confederación Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype) declaró «luto económico» por el cierre del 90% de sus unidades productivas. «Ya no tenemos cómo dar de comer a nuestras familias», afirmó su presidenta, Helen Rivero. El sector, que genera el 85% del empleo nacional, acusa al Gobierno de marginarlos con sus políticas.
Bloqueos y desabastecimiento
Transportistas bloquean rutas clave en La Paz, Cochabamba y Santa Cruz por la falta de combustible. «No podemos trabajar ni llevar comida a casa», denunció un chofer en Batallas. YPFB admitió que los bloqueos, especialmente en Cochabamba, dificultan la distribución normal de carburantes.
Gremialistas y vecinos en pie de guerra
Comerciantes protestan contra decomisos y la inflación que afecta a la canasta familiar. En El Alto, la Federación de Juntas Vecinales (Fedjuve) anunció un paro indefinido con bloqueos desde hoy, exigiendo frenar el alza de precios y la escasez de GLP.
Un país al borde del colapso
Bolivia enfrenta una crisis multifactorial: inflación récord, cierre masivo de mypes y desabastecimiento de combustibles. El Gobierno insiste en que la industrialización (con 150 plantas en construcción) es la solución, pero los sectores afectados demandan respuestas inmediatas.
El reloj corre para el Ejecutivo
Con plazos de 72 horas para regular precios y amenazas de nuevas movilizaciones, la presión social aumenta. La eficacia de los operativos de YPFB y los controles de precios será clave para evitar un estallido mayor.