Gobernador de California enfrenta críticas por política trans

Gavin Newsom recibe presiones por su postura ambigua sobre atletas trans, mientras el DOJ amenaza con acciones legales contra escuelas.
POLITICO

Gobernador de California enfrenta críticas por política sobre atletas trans

Gavin Newsom recibe presiones de Trump y aliados progresistas. La victoria de una estudiante trans en un campeonato estatal reavivó el debate sobre su postura ambigua. El Departamento de Justicia amenaza con acciones legales contra escuelas.

«Un paso en falso político»

El gobernador demócrata declaró en marzo que era «injusto» que atletas trans compitieran en equipos femeninos, alienando a progresistas. Sus palabras ahora son usadas por Trump, quien prometió «multas millonarias» a California. El DOJ exige revertir la ley estatal antes de la próxima semana, alegando discriminación sexual.

Repercusión nacional

El tema domina la cobertura conservadora y afecta a candidatos demócratas en California. El republicano Steve Hilton, aspirante a gobernador, prometió derogar la norma de 2013 que permite competir según identidad de género. «Terminaré esta crueldad», declaró en un mitin frente al campeonato.

California contra la Casa Blanca

Funcionarios estatales rechazaron las amenazas federales. El superintendente Tony Thurmond aseguró que «una carta no cambia la ley». Mientras, el fiscal general Rob Bonta prometió defender los derechos de estudiantes trans. Newsom, aunque crítico, no ha modificado la política vigente.

Un gobernador entre dos aguas

Newsom tiene historial de apoyo a derechos LGBTQ+, pero su veto a leyes sobre identidad de género y sus declaraciones recientes han generado escepticismo. Aliados como el asambleísta Alex Lee criticaron sus «tonterías en un podcast», aunque reconocieron su trayectoria progresista.

Un debate que no se detendrá

La polémica seguirá en la campaña para suceder a Newsom en 2026 y mantiene a California en el centro de la batalla cultural. Mientras, las escuelas enfrentan presiones contradictorias: aplicar la ley estatal o arriesgarse a sanciones federales.