Gobierno boliviano rechaza informe del FMI y defiende su modelo económico
El Ministerio de Economía califica de «alarmistas» las advertencias del Fondo Monetario Internacional. El Ejecutivo atribuye los problemas a fenómenos externos como bloqueos y sequías, y proyecta recuperación para 2025. La respuesta oficial se publicó hoy tras el análisis del Artículo IV.
«El FMI subestima los fenómenos extraordinarios»
El Gobierno boliviano asegura que el informe del FMI omite el impacto de bloqueos, incendios y sequías en 2024. «No son debilidades estructurales; la economía ha mostrado resiliencia», afirma el Ministerio de Economía. El documento oficial también destaca avances en estabilidad financiera y recuperación de reservas desde septiembre de 2023.
Las críticas del Fondo y la defensa estatal
El FMI alertó sobre desequilibrios fiscales, escasez de divisas y un modelo «insostenible», advirtiendo riesgos de un «ajuste desordenado». Sin embargo, el Ejecutivo boliviano rechazó estas previsiones: «Son recurrentes y no se han materializado». Además, defendió el manejo soberano de la política económica y el cumplimiento de obligaciones externas.
Reservas y deuda: la disputa de cifras
Mientras el FMI señaló niveles «extremadamente bajos» de reservas internacionales, el Gobierno destacó su recuperación progresiva. Sobre la deuda pública, insistió en que mantiene un «perfil saludable», pese al bloqueo legislativo de créditos por más de $us 1.800 millones.
Un modelo bajo la lupa
El FMI recomendó consolidación fiscal, reducción de subsidios y flexibilidad cambiaria, medidas que el Gobierno considera ajenas a la realidad boliviana. «Priorizamos la estabilidad social», insistió el Ministerio, al rechazar ajustes que podrían afectar a la población.
Entre proyecciones y realidades
El conflicto refleja diferencias en el diagnóstico económico. El FMI ve riesgos estructurales; el Gobierno insiste en que son coyunturales. La eficacia de las políticas oficiales se medirá en 2025, año en que se espera la anunciada recuperación.