Asesinan al teniente coronel Soliz en su cuartel de Montero
Un disparo en la cabeza acabó con la vida del militar. La Policía investiga tres hipótesis, incluido un posible ajuste de cuentas. Ocurrió el viernes por la noche en el Regimiento de Satinadores de Selva 12, donde la víctima residía.
Un crimen con «información privilegiada»
El teniente coronel Juan Javier Soliz Cáceres fue atacado por la espalda al ingresar a su vivienda militar. Testigos describieron a un hombre delgado y vestido de negro huyendo hacia cañaverales. «El autor conocía fallas de seguridad y la rutina de la víctima», afirmó el viceministro Jhonny Aguilera.
Las líneas de investigación
Las autoridades barajan: – Conflicto personal o sentimental (hipótesis prioritaria). – Posible apoyo logístico externo. – Una tercera línea no revelada por «estrategia». No hay indicios de robo, y se descartó inicialmente la participación de los cuatro militares armados presentes.
Pericias y rastreo de vínculos
La Fiscalía analiza el celular y la tablet del fallecido, además de realizar pruebas balísticas. El arma fue de grueso calibre. También revisan documentos del regimiento y declaran a compañeros de Soliz, incluidos aquellos con vínculos en gestiones pasadas.
Un cuartel sin seguridad perimetral
El crimen expuso graves falencias en el cuartel: no había cámaras, muro perimetral ni control estricto de acceso. Solo una tranca separaba la zona residencial del exterior. El ministro Roberto Ríos confirmó que el presidente Luis Arce exigió acelerar la investigación.
De los «Rangers» al velorio en Cochabamba
Soliz, comandante del regimiento ‘Rangers’, fue despedido ayer en el Cementerio Concordia de Tiquipaya. El Ejército no se ha pronunciado sobre posibles cambios en la estructura del regimiento tras su muerte.
Un crimen que espera respuestas
El caso sigue abierto, con interrogantes sobre el móvil y la identidad del atacante. Las pericias y declaraciones serán clave para confirmar o descartar las hipótesis planteadas por las autoridades.