Transporte pesado en Bolivia declara emergencia por falta de combustible

Más del 70% de los camiones están paralizados por la escasez de diésel en Bolivia, afectando principalmente a Santa Cruz. Dirigentes rechazan sumarse a protestas políticas y advierten con movilizaciones independientes.
El Deber

Transporte pesado en Bolivia declara emergencia por falta de combustible

Más del 70% de los camiones están paralizados por el desabastecimiento de diésel. Dirigentes rechazan sumarse a protestas vinculadas a Evo Morales y advierten con movilizaciones independientes si no hay solución. La crisis afecta principalmente a Santa Cruz, donde los surtidores están vacíos.

«No nos mezclaremos con Evo, pero esto ya no da para más»

Juan Yujra, líder del transporte pesado, denunció que el exmandatario «creó el problema y ahora quiere convulsionar el país». Aseguró que su sector no permitirá que su lucha sea instrumentalizada políticamente: «Estamos por sobrevivir, no por política». Criticó las restricciones de carga de combustible que imposibilitan viajes completos.

Colapso logístico y medidas extremas

En San Julián (Santa Cruz), los surtidores están vacíos y los camiones permanecen inactivos. Yujra calificó de «falsos» los anuncios de YPFB sobre agilización de suministros: «Solo sirven para la foto y el cafecito». El sector evalúa convocar a gremiales, agricultores y otros transportistas para protestas coordinadas.

Presión sin bloqueos… por ahora

Aunque el transporte cruceño aún no paraliza actividades por la campaña agrícola, amenaza con radicalizar medidas si no hay avances. En otras regiones, el transporte público ya anunció un paro nacional para el 3 de junio, con bloqueos, si el Gobierno no normaliza el abastecimiento.

Un país que se quedó sin gasolina

La escasez de combustibles es recurrente en Bolivia, pero se agravó tras los recientes bloqueos de rutas y tomas de plantas de almacenaje. El Gobierno enfrenta críticas por su manejo de la crisis, mientras sectores productivos exigen soluciones inmediatas para evitar el colapso económico.

¿Huelga nacional o solución negociada?

El transporte pesado espera respuesta gubernamental en los próximos días. Su decisión de movilizarse de forma autónoma podría marcar el rumbo de la crisis, evitando alianzas políticas pero sumando fuerzas sociales. La eficacia de las medidas dependerá de la capacidad de YPFB para restablecer el suministro.