Defensor del Pueblo exige a políticos priorizar crisis sobre campaña electoral

Pedro Callisaya reporta 374 conflictos en 2025 y alerta sobre escasez de alimentos, medicinas y combustible. La Defensoría del Pueblo instó al gobierno y al Tribunal Supremo Electoral a garantizar certidumbre ante la crisis multisectorial y las elecciones de agosto.

«La gente tiene hambre, no cálculos políticos»

El Defensor del Pueblo acusó a los actores políticos de ignorar la emergencia social: «Basta de cálculos, piensen en la población». Detalló que 12 de 21 productos básicos subieron más del 50%, con desabastecimiento de aceite en EMAPA y filas «desesperadas». En salud, 60% de farmacias públicas carece de medicamentos esenciales y hospitales como el del Niño cancelaron cirugías.

Combustible y transporte en crisis

Callisaya vinculó la escasez de carburantes con aumentos en pasajes, incluso para grupos con tarifas subsidiadas. «Los conductores esperan horas y la población paga las consecuencias», señaló.

Elecciones bajo «fragilidad institucional»

Criticó el «rol inusitado» de la justicia constitucional y la debilidad de órganos electorales, generando «incertidumbre» sobre los comicios de agosto. Exigió al Tribunal Supremo Electoral «hacer prevalecer sus competencias» para cumplir el calendario.

Un país al límite

Desde agosto de 2024, Bolivia enfrenta inflación récord en alimentos, colapso en salud y protestas por combustibles. La Defensoría registra un conflicto diario en promedio, con instituciones incapaces de responder a demandas ciudadanas.

Serenidad para evitar más violencia

Callisaya pidió a la población «canalizar demandas sin conflictividad», mientras monitorea la crisis. El llamado final fue claro: «La población quiere comer, seguridad económica y certidumbre».