Cisterneros atribuyen fallas de combustible a YPFB

Los cisterneros niegan responsabilidad en el desabastecimiento de carburante y señalan a YPFB por falta de nominaciones. Hay 1.600 camiones listos para importar.
unitel.bo
Cinco hombres sentados en una mesa con micrófonos y un cartel detrás.
Miembros de la federación de transporte en una conferencia de prensa con fondo verde y blanco.

Cisterneros atribuyen fallas de combustible a YPFB y niegan responsabilidad

1.600 camiones cisternas están disponibles para importar carburante. La Asociación de Cisterneros del Oriente asegura que el desabastecimiento se debe a la falta de nominaciones de YPFB, no a su sector. Las protestas por ajuste de tarifas continúan, pero garantizan el transporte normal.

«El carburante está entrando, pero YPFB debe explicar la falta de carga»

Maykol Montaño, dirigente del sector, afirmó que «en ningún momento hemos dejado de transportar», pero cuestionó a YPFB: «Esa pregunta tendrían que hacérsela ellos». Señaló que hay 1.600 camiones esperando en fronteras de Paraguay y Argentina, más 700 en Santa Cruz, listos para operar.

Protestas por tarifas, pero sin bloqueos

Los cisterneros exigen actualizar el pago de fletes debido al impacto del tipo de cambio paralelo, ya que el 60% de sus operaciones requiere dólares. Montaño aclaró que «no hemos bloqueado carreteras» y que trabajan con normalidad mientras negocian.

YPFB convoca reunión pero minimiza las protestas

Joel Callaú, gerente de YPFB Logística, acusó «especulaciones por parte del sector transporte» que afectan al abastecimiento. La estatal petrolera convocó a diálogo, pero los cisterneros insisten en que «el cuello de botella no es el transporte».

Un problema que va más allá de los camiones

El desabastecimiento de diésel y gasolina ha generado largas filas en surtidores. Bolivia depende de importaciones para cubrir la demanda interna, y los cisterneros son clave en esta cadena. Las últimas tensiones surgieron en 2023 por ajustes cambiarios no aplicados al sector.

La pelota está en el tejado de YPFB

El conflicto depende ahora de la respuesta de la petrolera estatal a las demandas tarifarias. Mientras, los cisterneros garantizan operatividad, pero urgen soluciones sostenibles para evitar más desabastecimiento.