Gobierno boliviano anuncia 11 medidas y 7 decretos ante crisis de combustible y alza de precios
Luis Arce admite «molestia» por desabastecimiento y especulación. El presidente atribuye la crisis a la falta de financiamiento externo y problemas logísticos. Las medidas incluyen control de precios, reforzamiento fronterizo y un plan agrícola de 350 millones de bolivianos.
«Castigo a la especulación y refuerzo en fronteras»
Arce anunció 11 medidas económicas y siete decretos para enfrentar la escasez de combustible y el alza de precios. «Entendemos la molestia por las colas en surtidores y la especulación», reconoció. Atribuyó parte del problema a la Asamblea Legislativa por no aprobar créditos para importar carburantes.
Desabastecimiento y logística
Cinco buques con combustible están varados en Arica por condiciones climáticas, según el mandatario. Además, denunció que cisterneros paralizan el abastecimiento. Prometió regularizar el suministro al 100% en La Paz, Cochabamba y Santa Cruz desde el 26 de mayo.
Combate al contrabando y control de precios
Se desplegarán 1.480 efectivos militares adicionales en fronteras para frenar el contrabando. Arce advirtió con «castigo» a comerciantes que practiquen agio o especulación. Instó a municipios a fiscalizar precios y pesos en mercados.
Medidas productivas y financieras
El gobierno lanzará un programa de 350 millones de bolivianos para aumentar la producción de maíz y arroz. Además, prohibió a YPFB usar activos virtuales (Decreto 5399) para reducir la especulación cambiaria.
Un país bajo presión
Bolivia enfrenta una crisis económica agravada por la escasez de combustible, inflación y falta de financiamiento externo. El gobierno lleva dos años solicitando créditos sin aprobación legislativa, lo que limita sus acciones. El contrabando y la especulación han exacerbado la situación.
Esperando resultados concretos
La eficacia de las medidas dependerá de su implementación inmediata. Mientras el gobierno promete normalizar el abastecimiento, la población sigue afectada por colas y precios altos. El reforzamiento fronterizo y las sanciones a especuladores buscan aliviar la presión a corto plazo.