Papa Leo XIV tiene raíces criollas negras en Nueva Orleans

Un historiador confirmó el linaje afrodescendiente del pontífice. Su familia materna proviene de la comunidad criolla de Luisiana, según documentos del siglo XIX. La noticia reabre el debate sobre identidad racial en EE.UU.

«Un papa con herencia africana»

El genealogista Jari Honora descubrió que los abuelos maternos de Leo XIV vivieron en el barrio criollo de Nueva Orleans. Su investigación, basada en registros censales y actas matrimoniales, revela que la familia del Papa fue clasificada como «mulata» en documentos históricos. «La identidad racial en EE.UU. es más compleja que el binario blanco-negro», señala Andrew Prevot, experto en estudios católicos.

Repercusión en la comunidad criolla

Los crioulos de Luisiana, descendientes de africanos, franceses y españoles, celebran el hallazgo. Muchos católicos afrodescendientes reclaman al Papa como parte de su legado, pese a que su familia no se identificaba como negra. La ley de Luisiana hasta 1983 consideraba «negro» a quien tuviese al menos 1/32 de ascendencia africana.

Cuando Luisiana mezcló razas y culturas

Antes de la Guerra Civil, Nueva Orleans albergó una clase criolla educada y católica, dueña de propiedades y negocios. El sistema de plaçage permitía uniones interraciales, aunque persistía la esclavitud. Tras la Reconstrucción, las leyes segregacionistas clasificaron a los crioulos como «negros», borrando sus privilegios.

Un legado que trasciende fronteras

El caso del Papa refleja cómo la diáspora criolla ocultó sus raíces para sobrevivir al racismo. Familias como la de Leo XIV migraron a Chicago durante la Gran Migración, adoptando identidades blancas. Hoy, su historia cuestiona las categorías raciales estáticas.

¿Qué significa para la Iglesia?

Como primer papa estadounidense, Leo XIV podría visibilizar la diversidad racial del catolicismo. Activistas esperan que aborde las desigualdades, aunque el Vaticano no se ha pronunciado sobre su herencia criolla.