Republicanos costeros exigen alivio fiscal en proyecto de Trump

Legisladores de Nueva York y California presionan para aumentar el límite de deducciones SALT, reflejando divisiones geográficas y de clase en el Partido Republicano.
POLITICO
Un hombre con traje oscuro es entrevistado por varias personas con micrófonos en un espacio cerrado.
Escena de una entrevista donde participan varias personas, destacando un hombre con barba y traje oscuro.

Republicanos costeros exigen alivio fiscal en proyecto de ley de Trump

Legisladores de Nueva York y California presionan para aumentar el límite de deducciones SALT. La disputa refleja la división geográfica y de clase dentro del Partido Republicano, con distritos ricos enfrentados a líderes de estados conservadores.

«Sin nosotros, pierden la mayoría»

Un grupo de republicanos de distritos adinerados, liderados por el congresista Mike Lawler (R-N.Y.), exige elevar el tope de deducciones fiscales estatales y locales (SALT) más allá de los $30,000 propuestos. «Estos escaños determinan el control del Congreso», advierte Lawler, cuyo distrito tiene una renta media de $119,000.

La grieta entre dos Américas republicanas

Los líderes del partido, como el presidente del Comité de Medios y Arbitrios Jason Smith (R-Mo.), representan estados con menores impuestos y rentas. Smith, oriundo de un parque de caravanas, impulsó un proyecto alineado con el giro obrero del GOP, ignorando las demandas de los distritos costeros.

Presión electoral y amenaza de derrota

Lawler alerta que, sin cambios en SALT, los republicanos suburbanos podrían sufrir en 2026 una repetición de las pérdidas de 2018. Trump apoya subir el límite, pero la mayoría roja prioriza otros aspectos de la reforma fiscal.

De Chappaqua a Cracker Barrel

El conflicto surge tras la reforma fiscal de 2017, que limitó las deducciones SALT a $10,000. Mientras distritos como el de Lawler pagan altos impuestos estatales y prediales, los republicanos de zonas rurales ven el tema como un beneficio para ricos.

Un juego de mayorías ajustadas

Con una ventaja mínima en la Cámara, los republicanos costeros tienen poder de veto. Lawler insiste en que sin distritos como el suyo, el GOP perderá el control, mientras críticos como Marjorie Taylor Greene los tildan de «RINOs» (republicanos solo de nombre).