EEUU deporta a inmigrantes asiáticos a Sudán del Sur incumpliendo orden judicial
Dos hombres de Myanmar y Vietnam fueron enviados a un país en crisis humanitaria. Abogados denuncian que la administración Trump ignoró una prohibición de deportaciones a «terceros países». Ocurrió entre el lunes y martes desde centros de detención migratoria.
«Deportación express sin aviso significativo»
Los abogados recibieron una notificación abrupta el lunes por la noche y para el martes por la mañana sus clientes ya volaban a Sudán del Sur junto a otros 10 deportados. El juez federal Brian Murphy había prohibido expresamente estas prácticas en 2024, exigiendo aviso previo y oportunidad de apelar por riesgo de tortura.
Historial de incumplimientos
Murphy intervino antes para frenar deportaciones a Libia, otro país en crisis. La notificación a N.M. (ciudadano birmano) estaba solo en inglés, pese a su dominio limitado del idioma, lo que violaría otra condición de la orden judicial. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) no ha comentado el caso.
Destino en llamas
Sudán del Sur, independizado en 2011, sufre una guerra civil desde 2013 con millones de desplazados y violencia étnica. La CIA alerta de que dos tercios de sus 11 millones de habitantes necesitan ayuda humanitaria. El Departamento de Estado advierte contra viajes al país por crimen violento y violaciones de derechos humanos.
Un patrón bajo la lupa
Esta no es la primera vez que la administración Trump intenta deportar a detenidos a países en conflicto. En 2024 abortaron vuelos a Libia tras presión mediática y legal. Los abogados alegan que N.M. estaba originalmente en esa lista.
Vuelo a la incertidumbre
La deportación exprés a un país con crisis alimentaria y sin vínculos con los afectados reaviva el debate sobre el cumplimiento de protecciones legales. El silencio del DHS deja en el aire si continuarán estas prácticas.