Cisterneros paralizan importación de combustibles en Bolivia por aumento de costos
5.500 cisternas dejarán de importar diésel y gasolina desde hoy. La Federación de Cisterneros exige a YPFB ajustar los fletes por el alza del dólar paralelo. El transporte de carga y pasajeros se declara en emergencia por desabastecimiento.
«No enviaremos más unidades al exterior»
Maikol Montaño, presidente de la Federación de Cisterneros del Oriente, confirmó que las cisternas retornarán al país pero no realizarán nuevas importaciones. «Nuestros costos operativos subieron un 300% por el tipo de cambio paralelo», explicó. YPFB mantiene el pago de fletes en bolivianos a 6.96 Bs/USD, mientras los repuestos y gastos se cotizan en dólares.
Impacto en la distribución local
César Mancilla, dirigente de cisterneros en Santa Cruz, advirtió que los surtidores se niegan a aumentar fletes porque YPFB no ajusta sus márgenes de ganancia. «Si no importamos, no habrá combustible para distribuir», alertó. Aunque YPFB asegura abastecimiento del 100%, las filas en estaciones del eje troncal se extendieron desde el lunes.
Transporte colapsa: «Trabajamos al 50% de capacidad»
Bismark Daza, líder del Transporte Federado en Santa Cruz, declaró emergencia: 60% del transporte pesado está paralizado y los urbanos operan con mitad de unidades. En Cochabamba, Gualberto Sánchez criticó que el aumento de 50 centavos en pasajes «no compensa» la cuadruplicación de precios de repuestos.
Un conflicto con raíces cambiarias
La protesta surge tras años de congelamiento de tarifas por YPFB y surtidores, mientras el dólar paralelo dispara costos logísticos. Los cisterneros importan desde Argentina, Brasil, Paraguay, Chile y Perú, donde los precios se ajustan a divisas.
El país frente a un desabastecimiento crítico
La medida afectará directamente a ciudadanos y sectores productivos. Sin acuerdo entre cisterneros, YPFB y surtidores, Bolivia enfrenta riesgo de escasez severa y nuevas protestas del transporte.