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OMS aprueba acuerdo global para prevenir futuras pandemias

124 países respaldan el primer tratado internacional sobre preparación sanitaria, garantizando acceso equitativo a vacunas y medicamentos.
Agencia de Noticias Fides - Bolivia

OMS aprueba acuerdo global para prevenir futuras pandemias

124 países respaldan el primer tratado internacional sobre preparación sanitaria. El pacto, negociado tras la COVID-19, busca garantizar acceso equitativo a vacunas y medicamentos. Se adoptó hoy en la 78ª Asamblea Mundial de la Salud en Ginebra.

«Un mundo más seguro frente a amenazas sanitarias»

El director general de la OMS, Tedros Adhanom, calificó el acuerdo como «una victoria para la salud pública y el multilateralismo». El texto establece mecanismos de coordinación internacional para mejorar la prevención, detección y respuesta ante pandemias. Incluye compromisos vinculantes para compartir el 20% de la producción farmacéutica en crisis.

Claves del acuerdo

El tratado respetará la soberanía nacional y no permitirá a la OMS imponer medidas como confinamientos o vacunaciones obligatorias. Creará un Sistema de Acceso a Patógenos (SAP) para intercambiar datos científicos y distribuir beneficios derivados de su investigación. Filipinas, presidiendo la Asamblea, destacó que «evitará pérdidas como las sufridas durante la COVID-19».

Próximos pasos

Entrará en vigor tras ser ratificado por 60 países. Un grupo intergubernamental diseñará antes de 2026 un mecanismo financiero y una red logística global para garantizar suministros médicos en emergencias. Los fabricantes deberán reservar el 20% de su producción para la OMS, priorizando a países en desarrollo.

Lecciones de una crisis sin precedentes

Las negociaciones comenzaron en 2022 tras los desequilibrios en el acceso a vacunas durante la pandemia. El texto refleja el consenso para evitar que se repitan desigualdades en la distribución de recursos sanitarios, uno de los mayores desafíos durante la COVID-19.

Un marco común para proteger vidas

El acuerdo sienta las bases legales para una respuesta global coordinada, aunque su eficacia dependerá de su implementación. Supone el primer paso hacia un sistema sanitario internacional más resiliente, según los Estados Miembros.