Trump invita al Papa León XIV a visitar la Casa Blanca

El presidente Donald Trump invita al Papa León XIV a la Casa Blanca, en lo que sería la primera visita papal desde 2015. El Vaticano aún no responde.
Agencia de Noticias Fides - Bolivia
Un hombre con vestimenta ceremonial religiosa levanta las manos.
Un líder vestido con atuendo ceremonial religioso frente a un fondo oscuro.

Trump invita al Papa León XIV a visitar la Casa Blanca

Sería la primera visita papal a la sede presidencial desde 2015. El vicepresidente JD Vance entregó la invitación durante un encuentro en el Vaticano. El Pontífice, primer papa nacido en EE.UU., aún no ha respondido.

«Una invitación con historia»

El presidente Donald Trump envió una carta al Papa León XIV a través de su vicepresidente, JD Vance, quien se reunió con el Pontífice en el Vaticano. La portavoz Karoline Leavitt confirmó que la invitación incluye «los más cálidos deseos» de Trump y la primera dama. De aceptarse, sería el cuarto pontífice en visitar la Casa Blanca.

Un precedente con peso

El último Papa en visitar la residencia presidencial fue Francisco en 2015, durante el mandato de Barack Obama. Juan Pablo II (1979) y Benedicto XVI (2008) completan la lista de visitantes. León XIV, de origen estadounidense, marcaría un hito como el primer Pontífice nacido en EE.UU. en pisar la sede del Gobierno.

El Vaticano y Washington: un diálogo en construcción

La invitación refleja el intento de Trump por estrechar lazos con la Santa Sede, aunque el Vaticano no ha anunciado su postura. La visita dependerá de la agenda del Papa y de posibles acuerdos bilaterales, en un contexto donde la diplomacia religiosa cobra relevancia global.

Cuatro décadas de encuentros

Las visitas papales a la Casa Blanca han sido escasas pero simbólicas: desde Juan Pablo II hasta Francisco, cada encuentro ha marcado etapas de diálogo entre EE.UU. y el Vaticano. La posible llegada de León XIV, en un escenario político polarizado, añadiría un capítulo a esta relación.

Un gesto que podría trascender

La aceptación de la invitación dependerá de factores logísticos y diplomáticos. De concretarse, sería un evento histórico por el origen del Pontífice y el contexto político actual. La Casa Blanca espera una respuesta en las próximas semanas.