Robert De Niro recibe la Palma de Oro de Honor en Cannes con discurso político
El actor criticó a Donald Trump y defendió el arte como amenaza contra el autoritarismo. La ceremonia de apertura del 78º Festival de Cannes incluyó homenajes póstumos y un llamado a la libertad artística. Leonardo DiCaprio entregó el galardón a su mentor.
«El arte es una amenaza para los autócratas»
Robert De Niro recibió la Palma de Oro Honorífica en una gala marcada por declaraciones políticas. El actor calificó a Trump como «presidente filisteo» y denunció sus políticas arancelarias: «La originalidad del arte no tiene precio, pero sí al parecer se le puede gravar con impuestos». Urgió al público a organizarse en defensa de la democracia.
Un homenaje entre maestros
Leonardo DiCaprio, encargado de entregar el premio, destacó que De Niro es «uno de los más grandes actores de la historia». Recordó su primer encuentro durante el casting de Vida de este chico y advirtió: «Habla poco, pero cuando lo hace, lo que dice importa».
Scorsese, Binoche y los ausentes
De Niro repasó su trayectoria en Cannes, desde Malas calles (1973) hasta Los asesinos de la luna (2023). La gala rindió tributo a la fallecida fotoperiodista palestina Fatma Hassouna, la actriz Émilie Dequenne y el director David Lynch. Juliette Binoche, presidenta del jurado, alertó sobre «guerra, pobreza y misoginia primitiva».
Un festival que no elude la realidad
La 78ª edición se inauguró con Quentin Tarantino gritando desde el escenario y la proyección simultánea en 382 cines franceses de Partir un jour, ópera prima de Amélie Bonnin. De Niro cerró su discurso invocando los valores republicanos: «Rendiremos homenaje a la libertad, igualdad y fraternidad».
De Malas calles a la consagración
El neoyorquino acumula cinco décadas de relación con Cannes, donde presidió el jurado en 2011. Su primer filme en competencia fue el clásico de Scorsese en 1976, y el último, la nominada al Oscar Los asesinos de la luna.
Arte y política bajo las palmeras
El festival reafirmó su perfil comprometido con discursos que vincularon creación cinematográfica y crisis global. La Palma de Oro Honorífica sirvió como plataforma para denunciar autoritarismos y reivindicar el cine como herramienta de cambio.