Especialista denuncia invisibilización de agresores sexuales

La socióloga Lopo Gutiérrez León critica la impunidad de clientes violentos y la culpabilización de víctimas en el trabajo sexual.
Agencia de Noticias Fides - Bolivia
Personas con gorras blancas sosteniendo carteles en una marcha.
Un grupo de personas participa en una marcha sosteniendo carteles que llaman a la no violencia.

Especialista denuncia que el patriarcado invisibiliza a agresores sexuales

La socióloga Lopo Gutiérrez León critica la impunidad de los clientes violentos. El sistema culpabiliza a las víctimas y niega derechos a las trabajadoras sexuales, según su análisis presentado en La Paz este 15 de mayo.

«El cliente violentador brilla por su ausencia en el debate»

Gutiérrez León señaló que el patriarcado libera de culpa a los hombres que consumen servicios sexuales o cometen agresiones. «Nadie habla del violentador sexual, ni siquiera cuando hay menores involucrados», remarcó. El foco se coloca siempre sobre las mujeres, perpetuando estereotipos que las deshumanizan.

Ciudadanía negada

La experta denunció que el Estado y la justicia tratan a las trabajadoras sexuales como «no ciudadanas». «Para el sistema patriarcal, las putas no son sujetos de derechos», enfatizó. Esto se traduce en obstáculos para acceder a justicia, especialmente en casos de feminicidios o violencia sexual.

Doble moral social

Gutiérrez León cuestionó por qué otros trabajos precarios no generan el mismo escándalo moral. Citando a la filósofa Silvia Federici, destacó que el trabajo sexual se sanciona más que explotaciones laborales extremas, como las maquilas o empleos domésticos sin derechos.

Raíces de una exclusión histórica

La socióloga vinculó esta discriminación con la cultura patriarcal que define quiénes merecen protección. Los prejuicios llevan a revictimizar a las trabajadoras sexuales: «Si es violada, se asume que ‘lo buscaba'». Esto explica la baja tasa de denuncias que prosperan.

Justicia solo para quienes pueden pagarla

Gutiérrez León cerró recordando que el acceso a derechos sigue siendo un privilegio de clase. Los datos de feminicidios e impunidad reflejan, según ella, un sistema que niega la igualdad a las mujeres más vulnerables.