Cognichip desarrolla IA generativa para acelerar creación de chips

La startup Cognichip, con $33M en financiación, desarrolla IA generativa para reducir un 50% el tiempo y coste de producción de semiconductores.
TechCrunch
Un hombre mayor con traje azul posando frente a un fondo de madera.
Un hombre vestido con un traje azul y camisa blanca mira a la cámara con una expresión amable. El fondo es de madera texturizada.

Cognichip desarrolla IA generativa para acelerar la creación de chips

La startup busca reducir un 50% el tiempo y coste de producción de semiconductores. La compañía, fundada en 2024 en San Francisco, acaba de salir del modo «stealth» con 33 millones de dólares en financiación inicial.

«Un sistema que actuará como ingeniero experto»

Cognichip construye un modelo de IA basado en física para agilizar el diseño de chips. Su fundador, Faraj Aalaei, veterano de la industria, advirtió en 2015 sobre la caída de inversión en semiconductores: «Perderíamos competitividad». La tecnología promete realizar el trabajo con menos personal y mayor rapidez, aunque su desarrollo completo tardará años.

El origen: una década de reflexión

Aalaei detectó el problema al analizar datos: las inversiones en semiconductores pasaron de 200 acuerdos anuales en 2000 a solo 1 o 2 en 2015. Tras fundar Candou Ventures en 2016, vio en la IA generativa una solución potencial. Lux Capital y Mayfield lideran la ronda de financiación, convencidos de que la startup aborda un «punto crítico» en esta industria billonaria.

Democratizar el acceso a la tecnología

La empresa, con equipo de Stanford, Google y MIT, aspira a facilitar el desarrollo de chips especializados para modelos más pequeños. Navin Chaddha (Mayfield) destaca: «No es una vitamina, sino un analgésico para la industria». Aalaei insiste en que buscan un cambio radical, no incremental, en la producción de semiconductores.

Un sector en busca de agilidad

La industria de chips enfrenta un cuello de botella: mientras los modelos de IA evolucionan rápidamente, los semiconductores tardan años en desarrollarse. La escasez de talento y los altos costes limitan la innovación, según el texto.

¿Revolución o promesa pendiente?

El éxito de Cognichip dependerá de alcanzar su meta de «inteligencia artificial para chips». De lograrlo, podría transformar la cadena de producción y atraer nueva inversión al sector.