Trump ignora el Pacífico al rebautizar el Día de la Victoria

El presidente propone celebrar el fin de la Segunda Guerra Mundial el 8 de mayo, omitiendo los más de 100.000 estadounidenses muertos en el frente del Pacífico.
POLITICO
Grupo de personas uniformadas en un acto formal al aire libre.
Una escena de una ceremonia con varios individuos en uniformes militares, observando mientras un hombre firma documentos sobre una mesa.

Trump ignora el Pacífico al rebautizar el Día de la Victoria en Europa

El presidente propone celebrar el fin de la Segunda Guerra Mundial el 8 de mayo, omitiendo los más de 100.000 estadounidenses muertos en el frente del Pacífico. La medida, criticada por historiadores, contrasta con el discurso de Truman en 1945.

«Una victoria a medias no es victoria»

Jonathan Horn, exasesor de la Casa Blanca, denuncia que el plan de Trump «recorta la historia» al ignorar los cuatro meses de guerra tras la rendición alemana. «Celebrar solo el 8 de mayo es un insulto a quienes lucharon en Okinawa o planearon la invasión de Japón», escribe en su columna.

El diario olvidado de un héroe

El general Wainwright, prisionero en Manchuria en 1945, documentó en su diario el agónico desconocimiento del fin de la guerra. «Dudaba que viviera para verla», relata Horn. Su liberación en septiembre simbolizó el verdadero final del conflicto.

Lecciones en riesgo

La orden ejecutiva de Trump busca «restaurar el patriotismo» en las aulas, pero, según Horn, «trunca el legado del sacrificio total». Truman, en cambio, usó el V-E Day para pedir más esfuerzo: «Nuestra victoria está solo a mitad».

Cuando el futuro pendía de un hilo

En 1945, EE.UU. planeaba invadir Japón con previsiones de miles de muertos, mientras científicos aceleraban la bomba atómica. Wainwright, sin noticias, creía que la guerra duraría hasta 1947.

Fotografía que vale más que mil discursos

El acto de rendición en el USS Missouri mostró a un Wainwright demacrado junto a MacArthur, recordando el precio completo de la victoria. Horn concluye: «La democracia necesita recordar que nada estaba garantizado».