Nuevo presidente del IBCE denuncia vetos a exportaciones que dañan empleo
Luis Ernesto Castedo calificó de «insufribles» las restricciones a las exportaciones. Asumió este miércoles la presidencia del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) y advirtió que estas medidas frenan el crecimiento económico. Criticó especialmente los vetos a la carne de res y los cupos a la soya.
«Vetos que golpean al motor de la economía»
Castedo afirmó que «los vetos a la exportación afectan a un sector clave generador de empleo». Señaló que estas restricciones perjudican a industrias dinámicas que, además de crear trabajo, impulsan la demanda de servicios y tienen un «efecto multiplicador» en la economía. Ejemplificó con el veto a la carne de res, que según la Cámara Agropecuaria de Bolivia (Caneb) causó pérdidas de 80 millones de dólares en tres meses.
Caída récord en comercio exterior
El nuevo presidente del IBCE reveló que las exportaciones bolivianas cayeron en 1.800 millones de dólares en 2024, agravando la escasez de divisas. «Exportar más es la única vía para sostener el tipo de cambio sin devaluar el boliviano», insistió. También alertó sobre la reducción de 1.600 millones en importaciones, donde «más del 50% eran insumos y bienes de capital», lo que compromete la producción nacional.
Prioridades: comercio exterior y lucha contra el contrabando
Castedo enfatizó que el IBCE trabajará en defender el comercio exterior y combatir el contrabando, al que definió como un flagelo que «aniquila empleos formales». Planteó mejorar la logística comercial, consolidar la Hidrovía Paraguay-Paraná y construir un Hub Aéreo en Viru Viru. «El desarrollo no es magia, es gestión», afirmó, pidiendo al Estado «seguridad jurídica y reglas claras» para incentivar la inversión privada.
Antecedentes: restricciones en un sector clave
Bolivia mantiene desde 2024 vetos a la exportación de carne de res y cupos para la soya (250.000 toneladas), pese a que los productores aseguran que el abastecimiento interno está garantizado. Estas medidas se implementaron en un contexto de caída histórica en las reservas internacionales y presión sobre el tipo de cambio.
Un llamado al cambio de estrategia
El discurso de Castedo marca un giro en la postura del IBCE: «La misma receta ya no funciona». Sus declaraciones reflejan la preocupación del sector exportador por las políticas restrictivas y su impacto en empleos y divisas. El reto ahora es cómo articular estas demandas con las decisiones del Gobierno nacional.