Gobernador beniano defiende fallo que reconoce Piso Firme como territorio de Beni
Una sala constitucional resolvió que la zona en disputa pertenece al departamento de Beni. El gobernador Unzueta pidió respetar la decisión jurídica, mientras autoridades cruceñas rechazaron el fallo. La disputa territorial data de 2021 y se basa en límites históricos.
«No es una victoria contra Santa Cruz, es un logro jurídico»
El gobernador de Beni, Alejandro Unzueta, afirmó que el fallo a favor de su departamento «defiende límites establecidos por ley». La resolución, emitida por una sala constitucional beniana, reconoce a Piso Firme como parte de Beni, pese a que históricamente fue administrado por el municipio cruceño de San Ignacio de Velasco.
Reacciones cruzadas
La institucionalidad cruceña, incluido el Comité Pro Santa Cruz, rechazó la decisión. El presidente cívico Stello Cochamanidis tildó el fallo de «jugada del masismo» y aseguró que «no cederán un milímetro de territorio». La Asamblea Legislativa Departamental (ALD) de Santa Cruz insistió en que Piso Firme «es y seguirá siendo cruceño».
Delimitación histórica y cartografía electoral
Unzueta recordó que desde 2021 se enviaron cartas al entonces gobernador cruceño Luis Fernando Camacho y al Viceministerio de Autonomías para delimitar el territorio con base en la Ley de 1914. Subrayó que «las comisiones mixtas de 2007 ya habían definido ese límite en la zona de Baure».
Enfoque técnico, no político
La Gobernación beniana negó que la acción popular tenga «fines electorales» y aseguró que se basó en documentos históricos y legales. «No estamos en contra de Santa Cruz, defendemos lo que nos pertenece», reiteró Unzueta, descartando confrontación.
Límites que dividen aguas
Piso Firme es un territorio en disputa que afecta a tres provincias cruceñas y abarca casi 500.000 hectáreas. Beni insiste en que la delimitación responde a cartografía electoral y asientos censales, mientras Santa Cruz alega administración histórica.
Sin ceder terreno
El fallo judicial reaviva una disputa territorial con implicaciones políticas y jurídicas. Mientras Beni celebra «un logro histórico», Santa Cruz asegura que no reconocerá la resolución. El conflicto podría escalar a instancias nacionales.