Hermano del vicepresidente Vance se postula a alcalde de Cincinnati

Cory Bowman, pastor y dueño de una cafetería, busca el cargo pese a su escasa experiencia política. Ausente en debates clave, su campaña se centra en perfilarse nacionalmente. La elección primaria es el 6 de mayo en una ciudad sin alcaldes republicanos desde hace 54 años.

«Ausencias que hablan más que sus propuestas»

Cory Bowman, medio hermano del vicepresidente JD Vance, faltó al debate organizado por la NAACP, uno de los eventos clave previos a las primarias. Según él, por un «conflicto de agenda», pero ese mismo día publicó una foto en Florida con un podcaster conservador. «Parece más interesado en construir un perfil nacional que en gobernar», critican sus detractores.

Una campaña improvisada

Bowman admitió que solo ha hecho dos jornadas de puerta a puerta y no ha recaudado fondos de manera sólida. Su plataforma mezcla temas locales (baches, nieve) con consignas nacionales como oponerse a las «ciudades santuario». Expertos como el politólogo David Niven lo tildan de «candidato por impulso».

El peso (y la sombra) de un apellido

Bowman atribuye su decisión de postularse a la inspiración tras ver la juramentación de su hermano en enero. Aunque Vance no ha respaldado públicamente su campaña, el vínculo familiar le ha dado visibilidad en medios conservadores como Newsmax o The Epoch Times. Sin embargo, en Cincinnati, un bastión demócrata, las encuestas lo dan perdedor frente al actual alcalde Aftab Pureval.

Hermanos en la política: ¿ventaja o lastre?

La historia política estadounidense está llena de familiares que intentaron capitalizar el éxito de sus parientes, con resultados dispares. Desde Roger Clinton hasta Billy Carter (que también perdió su candidatura a alcalde), muchos acabaron siendo una carga. Bowman insiste en que su motivación es «el amor por la ciudad», pero sus acciones sugieren otras prioridades.

Un futuro incierto tras las primarias

Aunque podría pasar a la elección general en noviembre, su falta de estructura y financiación limita sus opciones. Mientras Pureval recaudó $71,000, Bowman apenas supera los $13,500. Su destino parece más ligado a cómo use esta plataforma para futuros proyectos que a una victoria improbable en Cincinnati.