Albanese gana elección australiana tras rechazo a políticas estilo Trump

El primer ministro laborista logra mayoría gracias al desgaste del rival conservador vinculado a MAGA. El electorado penalizó la imitación de tácticas trumpistas y priorizó economía sobre guerras culturales. Resultado confirma tendencia global contra populismos de derecha.

«Victoria de valores australianos frente a sombra de Trump»

Anthony Albanese, del Partido Laborista, aseguró este sábado un triunfo contundente tras remontar en las encuestas, mientras el conservador Peter Dutton perdió incluso su escaño. La clave: el electorado asoció al opositor con el impopular Donald Trump, cuyo enfrentamiento con Ucrania y aranceles dañaron la imagen de Dutton. 66% de australianos desconfía ahora de EE.UU. como aliado, según YouGov.

Estrategia fallida: copiar a MAGA

Dutton, líder del Partido Liberal, alabó públicamente a Trump como «gran pensador» y adoptó sus tácticas: recortes al sector público, ataques a medios y rechazo a teletrabajo. El laborismo argumentó que estas medidas perjudicarían especialmente a mujeres. La gota que colmó el vaso fue la propuesta de Dutton de instalar una planta nuclear en su propio distrito, decisiva para su derrota.

Economía vs. cultura

Mientras Albanese centró su campaña en vivienda e inflación, Dutton optó por guerras culturales: criticó ceremonias indígenas y acusó a escuelas de «avergonzar a los niños por ser australianos». El enfoque alejó a votantes jóvenes y mujeres, que migraron hacia laboristas o independientes ecologistas (los «Teals»).

Cuando imitar a Trump cuesta el escaño

El declive conservador en Australia refleja el de Canadá, donde el progresista Mark Carney venció a un rival también asociado a Trump. 70% de australianos temía que Trump los empobreciera, según encuestas. Albanese cerró su discurso victorioso subrayando: «Nuestra inspiración está aquí, no en el extranjero», en clara alusión a Dutton.

Un mensaje para la derecha global

El resultado demuestra que las tácticas trumpistas generan rechazo en democracias avanzadas, especialmente entre mujeres y jóvenes. Dutton admitió en su concesión: «Claramente no fue suficiente». Sin embargo, a diferencia de Trump, aceptó la derrota sin cuestionar los resultados.