UE admite que romper con dominio tecnológico de EE.UU. es «irreal»
Un borrador de estrategia reconoce la dependencia europea de gigantes como Amazon y Google. La UE priorizará alianzas con países afines ante la presión geopolítica y el regreso de Trump. El documento será presentado en junio.
«Desacoplarse no es una opción viable»
La Unión Europea considera «irrealista» reducir su dependencia tecnológica de Estados Unidos, según un borrador de su Estrategia Digital Internacional obtenido por POLITICO. El texto, previsto para junio, señala que «la cooperación transatlántica seguirá siendo clave» en áreas como chips, inteligencia artificial y ciberseguridad.
Presión geopolítica
El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca ha reavivado preocupaciones sobre soberanía digital, especialmente en redes sociales, servicios en la nube y acceso a datos por parte de autoridades estadounidenses. La UE busca equilibrar la cooperación con EE.UU. y alianzas con India, Japón y Corea del Sur para diversificar riesgos.
China, el otro frente
Frente a Pekín, la estrategia es más defensiva: la UE mantendrá su veto a proveedores como Huawei en redes 5G y extenderá esta política a cables submarinos. El borrador propone «construir infraestructuras críticas solo con países afines», replicando la diplomacia digital usada contra la tecnológica china.
Críticas internas
Figuras como la exeurodiputada Marietje Schaake exigen «medidas concretas» para reducir la dependencia de EE.UU. En Bruselas, gana fuerza la idea de un «Eurostack», un plan industrial para crear alternativas europeas a las plataformas tecnológicas estadounidenses.
Entre la dependencia y la soberanía
La UE arrastra una dependencia histórica de la tecnología estadounidense, agravada por la pandemia y las tensiones comerciales. Aunque ha impulsado regulaciones como el DMA y el DSA para limitar el poder de los gigantes tecnológicos, carece de campeones tecnológicos propios a escala global.
Un futuro de alianzas, no de ruptura
La estrategia confirma que la UE priorizará colaboraciones selectivas sobre la autosuficiencia. Su éxito dependerá de equilibrar seguridad económica con innovación, en un escenario donde EE.UU. y China controlan los eslabones clave de la cadena tecnológica.