Gobierno alemán impulsa pago con tarjeta para reducir evasión fiscal
La nueva coalición busca obligar a comercios a aceptar pagos digitales. La medida apunta a combatir el fraude en pequeños negocios, donde el 50% de las transacciones ya son sin efectivo. Ejemplo: una heladería en Berlín solo opera con métodos electrónicos desde la pandemia.
«Sin billetes, más transparencia»
Ralf Sander, dueño de la heladería ‘Gimme Gelato’ en Berlín, eliminó el efectivo en 2020 por higiene y lo mantiene por «rapidez y menores costes». Su caso ilustra el debate: aunque la mitad de los pagos en Alemania son digitales, muchos locales aún rechazan tarjetas. La futura coalición gubernamental (CDU/SPD) argumenta que la obligatoriedad reduciría la evasión, estimada en miles de millones anuales.
Los argumentos en contra
Algunos comerciantes resisten por «las comisiones de los terminales», que encarecen las ventas pequeñas. Sin embargo, expertos señalan que los sistemas actuales son más económicos que el manejo de efectivo, que incluye riesgos de robos y errores.
De la pandemia a la política fiscal
La COVID-19 aceleró la adopción de pagos digitales en Europa, pero Alemania sigue siendo una economía con alta circulación de efectivo. El último intento regulatorio similar data de 2021, sin éxito por presión de pequeños empresarios.
Un cambio con efectos inmediatos
Si se aprueba, la normativa obligaría a mostrar todas las transacciones, dificultando la omisión de ingresos. Para los clientes, supondría garantizar el pago con tarjeta en cualquier establecimiento, algo que hoy no ocurre en el 30% de los casos según datos oficiales.