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Hospitales de La Paz enfrentan escasez crítica de medicamentos

Pacientes vulnerables deben comprar fármacos por su cuenta debido a la falta de insumos en hospitales como el de Clínicas y el Gastroenterológico. Autoridades no definen quién debe asumir las compras.
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Persona sosteniendo un contenedor de plástico transparente con tapa roja en un entorno de almacenamiento.
Una imagen que muestra a una persona sosteniendo un contenedor etiquetado dentro de un área de almacenamiento con otros contenedores similares.

Hospitales de La Paz enfrentan escasez crítica de medicamentos

Pacientes vulnerables deben comprar fármacos por su cuenta. La falta de insumos afecta a centros como el Hospital de Clínicas y el Gastroenterológico. Autoridades no definen quién debe asumir las compras, mientras se agrava con la llegada del frío.

«Solo nos dan dos de los tres medicamentos recetados»

Pacientes del Sistema Único de Salud (SUS) relatan gastos de hasta 400 bolivianos en farmacias privadas. «A veces se hace harto», explica una mujer atendida en el Hospital de Clínicas, cuya hija tampoco recibió los cuatro fármacos prescritos. El problema se repite en otros centros, como el Auxilio La Paz 167, sin vacunas contra COVID-19 o influenza desde 2024.

Disputa entre autoridades

Gobierno y Gobernación de La Paz no se ponen de acuerdo sobre la responsabilidad de las compras. La situación se complica por la falta de dólares y los precios elevados de los medicamentos. Funcionarios hospitalarios esperan soluciones prontas, pero la llegada del invierno aumenta la urgencia.

Un problema que no es nuevo

La escasez se arrastra desde 2024, con denuncias previas en otros centros. Pacientes señalan que recibieron medicamentos al inicio, pero luego debieron adquirirlos por su cuenta. La Alcaldía paceña también enfrenta críticas por el desabastecimiento en sus dependencias.

Falta de insumos en plena temporada de riesgo

La crisis afecta especialmente a familias vulnerables que dependen del SUS. Con la época fría, la demanda de vacunas y tratamientos aumenta, pero la disponibilidad sigue limitada. La situación expone fallas en la gestión y distribución de recursos sanitarios.