George Santos condenado a 7 años por fraude y malversación

El excongresista republicano George Santos fue sentenciado a 87 meses de prisión por fraude electrónico y robo de identidad, tras estafar donantes y desviar fondos de campaña.
POLITICO
Tres hombres caminando de manera cercana con gafas de sol.
Un grupo de tres hombres en una caminata cercana, todos con gafas de sol, bajo un cielo despejado.

Condenan a George Santos a más de 7 años de prisión por fraude

El excongresista republicano admitió estafar donantes y malversar fondos de campaña. Fue expulsado del Congreso en 2023 tras revelarse su historial de mentiras y delitos financieros. La sentencia incluye restitución de 373.000 dólares.

«Un mentiroso patológico»: la caída de un farsante

George Santos, exrepresentante de Nueva York, recibió 87 meses de prisión por fraude electrónico y robo de identidad agravado. La jueza federal Joanna Seybert lo calificó de «estafador arrogante» por desviar fondos de campaña para gastos personales, como compras de lujo y viajes. Debe ingresar a prisión antes del 25 de julio.

Los delitos: fraude sistémico

Santos robó datos de donantes mayores o con discapacidad cognitiva para hacer contribuciones ilegales. También creó una empresa falsa para desviar dinero a sus cuentas. Admitió haber «traicionado la confianza» de votantes y colegas en su declaración final.

Repercusión política

Expulsado del Congreso en 2023 (el primero en 160 años sin condena previa), su caso aceleró la pérdida de su escaño, recuperado por los demócratas. Fiscales destacaron que «su campaña solo reveló lo que ya era: un fraude».

De héroe local a villano judicial

Santos ganó notoriedad en 2022 al ganar un distrito en Long Island con una biografía inventada (incluida la falsa muerte de su madre en el 11-S). Su caída comenzó en 2023, cuando investigaciones destaparon sus mentiras y malversación de fondos públicos y privados.

Justicia sin remordimiento

La sentencia cierra un caso que expuso la impunidad inicial de Santos, quien minimizó sus crímenes en redes sociales. Pese a su disculpa formal, fiscales demostraron su falta de arrepentimiento. La restitución y libertad vigilada buscan reparar parcialmente el daño a víctimas y al sistema electoral.