EEUU designa a Michael Anton para liderar negociaciones técnicas con Irán
El director de Planificación Política del Departamento de Estado encabezará el equipo técnico. Las conversaciones buscan limitar el programa nuclear iraní a cambio de alivio sancionador. La primera ronda se celebrará este fin de semana, antes de un encuentro en Roma la próxima semana.
«El hombre perfecto para el trabajo»
Michael Anton, un funcionario discreto pero influyente, dirigirá un equipo de una docena de expertos para concretar los detalles del acuerdo. Un oficial de la administración lo describió como clave para «asegurar que se cumpla la agenda del presidente Trump». Anton ya acompañó al enviado especial Steve Witkoff en la última ronda de negociaciones en Roma.
Objetivos y divisiones internas
El gobierno estadounidense debate entre una solución diplomática o acciones militares para evitar que Irán obtenga armas nucleares. Israel presiona para que EEUU actúe ahora, mientras Trump prefiere la vía negociadora. El secretario de Estado Marco Rubio señaló que EEUU podría permitir un programa nuclear civil iraní sin enriquecimiento de uranio.
Un acuerdo bajo incógnitas
No está claro si EEUU exigirá el desmantelamiento total del programa nuclear iraní o un acuerdo con medidas de verificación estrictas. Witkoff ha cambiado su postura públicamente: primero habló de centrarse en la verificación, pero luego insistió en «no permitir ningún enriquecimiento».
Antecedentes: Un debate divisivo en Washington
El programa nuclear iraní ha generado fuertes controversias en EEUU. Anton, exmiembro del Consejo de Seguridad Nacional y vinculado al conservador Claremont Institute, no ha tomado postura pública previa sobre el tema. Las negociaciones avanzan en un contexto de presión de aliados como Israel y divisiones internas en la administración Trump.
¿Diplomacia o confrontación?
El éxito de las conversaciones dependerá de la capacidad de Anton y su equipo para conciliar las demandas técnicas con las presiones políticas. Mientras Irán insiste en el carácter civil de su programa, EEUU busca garantías que impidan su uso militar.