DNC exige neutralidad a David Hogg en primarias demócratas

El presidente del DNC, Ken Martin, propone prohibir a cargos del partido apoyar candidaturas rivales, medida que afectaría directamente al vicepresidente David Hogg.
POLITICO
Persona en un escenario hablando frente a un micrófono.
Un individuo con traje habla gesticulando en un escenario con micrófonos visibles.

Presidente del DNC exige neutralidad a David Hogg en primarias demócratas

Ken Martin propone prohibir a cargos del partido apoyar candidaturas rivales. La medida afectaría directamente al vicepresidente del DNC, vinculado a un grupo que financiará retadores en primarias. El conflicto escaló este jueves tras declaraciones cruzadas.

«No puedes ser árbitro y jugador a la vez»

El presidente del Comité Nacional Demócrata (DNC), Ken Martin, advirtió que los cargos partidistas deben «decidir» entre su rol institucional o el activismo electoral. La regla, que se votará en agosto, obligaría a David Hogg a abandonar su vicepresidencia o su grupo Leaders We Deserve, que invertirá 20 millones de dólares en desafiar a demócratas «ineficaces».

La réplica de Hogg

El activista aseguró que «no incumple normas actuales» y acusó al DNC de modificarlas para frenarle. «Mi trabajo no interfiere con el calendario de primarias ni la infraestructura nacional», defendió en un comunicado. Sin embargo, admitió estar dispuesto a perder su cargo en esta disputa.

Más fondos para los estados

Martin anunció que el DNC destinará un millón mensual a comités estatales durante cuatro años, cuadruplicando su presupuesto. «Terminó la era de concentrarse solo en estados clave», declaró, reforzando su promesa de descentralizar el partido.

Un partido en busca de cohesión

La polémica surge tras años de tensiones entre la estructura nacional y bases progresistas. El DNC, históricamente criticado por su enfoque en elecciones presidenciales, intenta ahora equilibrar disciplina interna y diversidad ideológica.

La pelota está en el tejado de agosto

La votación del nuevo reglamento marcará el futuro de Hogg en el DNC y sentará un precedente sobre la neutralidad partidista. Mientras, el aumento de fondos estatales refleja un cambio estratégico para fortalecer al partido a largo plazo.