DNC exige a David Hogg neutralidad o abandono de su cargo
El Comité Nacional Demócrata (DNC) propone obligar a sus dirigentes a no intervenir en primarias. La medida, que se votará en agosto, afecta directamente al vicepresidente David Hogg, quien financia retos a candidatos demócratas titulares. La polémica surge tras su anuncio de invertir 20 millones de dólares en esas campañas.
«Elija entre su puesto o su activismo»
El presidente del DNC, Ken Martin, presentará este jueves una reforma que exige neutralidad a todos los oficiales del partido en primarias. La norma, según fuentes internas, busca frenar el conflicto generado por Hogg, quien prometió apoyar retos contra demócratas «ineficaces» en escaños seguros. «No se trata de David, es parte de un paquete de reformas más amplio», declaró Jane Kleeb, presidenta de la Asociación de Partidos Demócratas Estatales.
La respuesta de Hogg
El activista, conocido por su lucha contra la violencia armada tras sobrevivir al tiroteo de Parkland, afirmó que «luchará por mantener su puesto», aunque admitió estar dispuesto a perderlo. Su grupo, Leaders We Deserve, planea gastar 20 millones en desafiar a titulares del partido, lo que generó críticas de líderes demócratas que lo acusan de crear una «guerra interna».
Un voto clave en agosto
La propuesta, que modificaría los estatutos del DNC, será sometida a votación en la reunión de agosto. Incluye otras medidas de transparencia, según Martin. NOTUS fue el primer medio en reportar la ampliación de las normas de neutralidad. Hogg deberá decidir entonces entre su cargo o su campaña contra los «demócratas dormidos».
De Parkland al centro de la polémica partidista
Hogg saltó a la fama como activista en 2018 tras el tiroteo en su escuela de Florida. Su incursión en la política partidista, especialmente con su grupo para desafiar a titulares demócratas, ha generado tensiones crecientes con el establishment del DNC y congresistas.
Una batalla con consecuencias para el partido
El desenlace de este conflicto marcará el equilibrio entre el activismo interno y la disciplina partidista en el DNC. La votación de agosto definirá si Hogg puede mantener su doble rol o si la neutralidad se impone como norma obligatoria.