Bluesky censura 72 cuentas en Turquía por orden gubernamental

La red social Bluesky bloqueó 72 cuentas en Turquía por solicitud del gobierno, generando debate sobre su promesa de descentralización y la efectividad de la censura.
TechCrunch
Un teléfono móvil con una aplicación abierta y figuras de mariposas azules de fondo.
Imagen de un dispositivo móvil que muestra una aplicación en la pantalla, mientras que en el fondo se aprecian figuras de mariposas azules desenfocadas.

Bluesky censura 72 cuentas en Turquía por orden gubernamental

La red social bloqueó perfiles bajo el argumento de «seguridad nacional». La medida afecta solo a la app oficial, mientras aplicaciones de terceros permiten eludir las restricciones. Ocurrió este mes tras una solicitud de autoridades turcas.

«La censura llega al ecosistema descentralizado»

Bluesky restringió el acceso a 59 cuentas por «orden público» y ocultó otras 13, según un informe de la Freedom of Expression Association. Muchos usuarios turcos migraron a esta plataforma para evadir controles en X, lo que ha generado dudas sobre su promesa de descentralización.

El vacío legal de las apps alternativas

La censura no aplica en clientes externos como Skeets o Deer.social, ya que no usan los «etiquetadores geográficos» de Bluesky. Estos sistemas son opcionales para desarrolladores, pero podrían volverse obligatorios si gobiernos como Turquía presionan a tiendas de aplicaciones.

Un precedente con fecha de caducidad

Turquía ya bloqueó cuentas en X y Mastodon, donde los usuarios cambiaban de servidor para evitar restricciones. En Bluesky, la moderación opera a nivel de cliente, no de infraestructura, lo que facilita eludirla temporalmente con apps como Deer.social, que permite desactivar la geolocalización.

¿Hacia una censura globalizada?

El caso turco abre la puerta a que otros gobiernos soliciten bloqueos. Aunque la app oficial es la más afectada, su alcance masivo convierte este episodio en un punto de inflexión para la plataforma.

Mirando al futuro con apps alternativas

La eficacia de los bloqueos dependerá de la adopción de etiquetadores geográficos en terceras apps. Mientras, herramientas como Deer.social ofrecen configuraciones manuales para evitar la censura, aunque su impacto real es limitado por su menor base de usuarios.