Líderes europeos advierten a Trump sobre el juego de Putin con las sanciones
Macron y Starmer rechazan flexibilizar sanciones a Rusia sin avances de paz. La cumbre en París reforzó la postura común frente a la presión de EE.UU. para aliviar restricciones como moneda de cambio. Zelenskyy alertó sobre tácticas dilatorias del Kremlin.
«Putin vuelve a su manual de trucos»
Los líderes europeos, incluidos Macron, Scholz y Meloni, descartaron relajar sanciones hasta lograr un alto al fuego real. Starmer afirmó que Rusia «juega con la mesa de negociación», mientras Macron instó a Trump a no caer en promesas vacías: «Si Rusia no viene, será una traición». La UE mantiene vetos clave como la exclusión de bancos rusos de SWIFT.
Zelenskyy marca diferencias
El presidente ucraniano criticó al enviado estadounidense Witkoff por considerar «postura y pose» el plan europeo de enviar tropas: «Vivimos en realidades distintas». Macron confirmó que Reino Unido y Francia liderarán una coalición para definir en semanas un plan militar concreto.
Antecedentes: Sanciones como herramienta de guerra
Las sanciones occidentales a Rusia, implementadas tras la invasión a Ucrania en 2022, han sido un pilar de la presión económica. EE.UU. busca ahora usarlas como incentivo, mientras la UE insiste en mantenerlas hasta garantías verificables. El UDCG (Grupo de Contacto de Defensa de Ucrania), antes liderado por Washington, ahora es coordinado por Alemania y Reino Unido.
Próximos pasos en Bruselas
La reunión del 11 de abril del UDCG definirá nuevos apoyos militares a Ucrania. La posición europea, consolidada en París, deja claro que cualquier flexibilización de sanciones dependerá de compromisos rusos verificables, no de promesas temporales como la suspensión de ataques a infraestructuras energéticas.