Ponchos Rojos cercan la Plaza Murillo y advierten con masificar protestas
Este miércoles 19 de marzo de 2025, los Ponchos Rojos, una organización campesina liderada por David Mamani, marcharon desde El Alto hasta la Plaza Murillo en La Paz, en protesta por la falta de soluciones a la crisis económica y energética que atraviesa Bolivia. Los manifestantes advirtieron que cuentan con más de 200 escuadrones de “policía sindical” para intensificar las medidas de presión si el gobierno no responde a sus demandas.
La protesta y sus demandas
Los Ponchos Rojos, caracterizados por su vestimenta tradicional y su fuerte presencia en movilizaciones sociales, calificaron de “incapaces” a las autoridades gubernamentales y exigieron renuncias masivas si no se toman medidas concretas para paliar la crisis. La marcha, que congregó a cientos de campesinos, se dirigió hacia el corazón político del país, la Plaza Murillo, donde se encuentran el Palacio de Gobierno y el Legislativo.
Luis Limachi Mamani, representante de uno de los escuadrones, declaró a la Agencia de Noticias Fides (ANF) que “el pasamontaña y los chicotes son parte de la vestimenta” de la “policía sindical”, una estructura organizativa que, según él, cuenta con más de 200 escuadrones y un Estatuto Orgánico que regula su funcionamiento.
Contexto de la crisis
La movilización se produce en un momento crítico para Bolivia, que enfrenta una crisis energética y económica sin precedentes. El gobierno nacional anunció recientemente 10 medidas para mitigar la escasez de combustible, pero estas han sido calificadas como insuficientes por diversos sectores sociales. La inflación, el desabastecimiento de gasolina y la caída de la producción agrícola han generado un malestar generalizado, especialmente en las zonas rurales y entre los sectores más vulnerables.
Además, la encuesta internacional publicada el 11 de febrero de 2025 posicionó al presidente Luis Arce como uno de los mandatarios con peor desempeño en la región, lo que ha exacerbado las críticas hacia su gestión.
Reacciones y posibles repercusiones
La advertencia de los Ponchos Rojos sobre la existencia de una “policía sindical” ha generado preocupación en algunos sectores, que temen un escalamiento de la violencia en las protestas. Sin embargo, los dirigentes campesinos insisten en que su lucha es pacífica y busca presionar al gobierno para que atienda las demandas populares.
Por su parte, el gobierno no ha emitido una respuesta oficial a las declaraciones de los Ponchos Rojos, aunque fuentes cercanas al Ejecutivo indicaron que se están evaluando medidas adicionales para enfrentar la crisis energética y económica.
Antecedentes históricos
Los Ponchos Rojos tienen una larga trayectoria en la historia reciente de Bolivia. Surgieron como una organización de base indígena-campesina en la década de 1990 y han participado activamente en movilizaciones sociales clave, como la Guerra del Gas en 2003 y las protestas que llevaron a la renuncia de Gonzalo Sánchez de Lozada. Su presencia en las calles ha sido un termómetro del descontento social en momentos de crisis política y económica.
En esta ocasión, su movilización refleja el descontento acumulado por la falta de soluciones efectivas a los problemas estructurales del país, como la dependencia de los hidrocarburos y la falta de diversificación económica.
Fuentes y transparencia
La información sobre la marcha y las declaraciones de los Ponchos Rojos fue proporcionada por la Agencia de Noticias Fides (ANF), que entrevistó a Luis Limachi Mamani, representante de uno de los escuadrones. Además, se consultaron fuentes gubernamentales no oficiales y se contrastó con datos históricos sobre la organización campesina.
La movilización de los Ponchos Rojos marca un nuevo capítulo en la crisis política y social que atraviesa Bolivia. Con más de 200 escuadrones organizados y una advertencia clara de intensificar las protestas, la presión sobre el gobierno de Luis Arce no hace más que aumentar. Mientras tanto, la población espera respuestas concretas que permitan superar la crisis energética y económica que afecta a todo el país.