Bloqueos en El Alto paralizan distribución de combustibles y GLP

Los bloqueos en El Alto, liderados por choferes y juntas vecinales, han detenido la salida de combustibles y GLP desde la planta de Senkata, afectando a La Paz, El Alto y otras regiones.
unitel.bo
Camiones estacionados junto a un tanque de almacenamiento de combustible.
Una imagen que muestra varios camiones estacionados junto a un gran tanque de almacenamiento de combustible bajo un cielo nublado.

Bloqueos en El Alto paralizan la distribución de combustibles y GLP en Bolivia

El bloqueo de vías en El Alto, impulsado por choferes del transporte público y juntas vecinales, ha paralizado la salida de camiones cisterna con combustibles y garrafas de Gas Licuado de Petróleo (GLP) desde la planta de Senkata. La medida, activada desde la madrugada del miércoles, afecta el abastecimiento de La Paz, El Alto y otras provincias, generando largas filas en estaciones de servicio y complicando el transporte interdepartamental.

YPFB asegura tener stock, pero los bloqueos impiden la distribución

Álvaro Tumiri, gerente de Comercialización de YPFB, confirmó que la empresa cuenta con suficiente combustible y GLP para abastecer la demanda, pero los bloqueos en El Alto están impidiendo su distribución. “Tenemos el combustible, tenemos las garrafas, queremos distribuirlos, pero los puntos de bloqueo están generando bastantes problemas”, declaró Tumiri. Desde la noche del martes, YPFB logró despachar 80 cisternas, alcanzando el 100% de su capacidad, pero la situación se complicó con el cierre de vías clave como la avenida 6 de Marzo, donde se ubica la planta de Senkata.

Impacto en la población y el transporte

El paro ha dejado sin circulación a los vehículos en varias rutas troncales, incluyendo la carretera hacia Oruro, y ha generado largas filas en estaciones de servicio. Además, la distribución de GLP, esencial para cocinar en miles de hogares, también se ha visto afectada. “Aún tenemos saldos, pero nuestros camiones están teniendo problemas para llegar a La Paz”, lamentó Tumiri. La situación ha obligado a los ciudadanos a buscar alternativas de transporte, como el uso masivo del teleférico, lo que ha generado filas de más de una hora y caminatas de varios kilómetros.

Reacciones y exigencias de los sectores movilizados

Los choferes del transporte público y las juntas vecinales exigen una rebaja en los precios de los combustibles y mejoras en las condiciones laborales. La movilización ha ganado fuerza en los últimos días, sumando a otros sectores sociales que reclaman atención a sus demandas. Mientras tanto, las autoridades de YPFB insisten en que están listos para abastecer el mercado, pero necesitan que se levanten los bloqueos para poder operar con normalidad.

Antecedentes de conflictos por combustibles en Bolivia

Este no es el primer conflicto relacionado con la distribución de combustibles en Bolivia. En los últimos años, el país ha enfrentado varias crisis debido a paros y bloqueos que han afectado el suministro de gasolina, diésel y GLP. La planta de Senkata, una de las más importantes del país, ha sido escenario de protestas recurrentes, especialmente en momentos de tensiones políticas o sociales. En 2019, durante la crisis postelectoral, la planta fue tomada por manifestantes, lo que generó una grave escasez de combustibles en La Paz y El Alto.

Fuentes y transparencia

La información ha sido confirmada por declaraciones de Álvaro Tumiri, gerente de Comercialización de YPFB, y reportes de medios locales como Unitel Digital. Además, se han contrastado datos con testimonios de ciudadanos afectados por los bloqueos y representantes de los sectores movilizados.

La situación en El Alto sigue siendo crítica, con bloqueos que impiden la distribución de combustibles y GLP, afectando a miles de familias y complicando el transporte en todo el país. Mientras las autoridades de YPFB aseguran tener stock suficiente, la solución dependerá de que se levanten los bloqueos y se retome el diálogo entre los sectores movilizados y el gobierno. Mientras tanto, la población sigue enfrentando largas filas y dificultades para acceder a productos esenciales.